Un plan para Vinicius
LaLiga estrena en El Sadar su operativo para evitar los gritos racistas al madridista, que incluye espectadores infiltrados en las gradas más conflictivas.
Javier Tebas ya lo anticipó y esta noche en El Sadar se pondrá en marcha el nuevo operativo de LaLiga contra los gritos racistas que Vinicius está teniendo que soportar en varios campos de España esta temporada, como el Metropolitano, Zorrilla o Son Moix. El repunte de situaciones de este tipo, que son replicadas en los medios semana a semana, ha llevado a la patronal del fútbol a tomar una nueva medida para intentar erradicar los insultos de corte xenófobo. “LaLiga no puede tener a un jugador que es insultado de forma grave en todos los campos a los que va. Está claro que tenemos un problema y debemos encontrar una solución”, explicó Tebas la pasada semana.
El operativo se centrará de momento únicamente en los partidos del Real Madrid como visitante, pues ha sido en estos en los que se han detectado insultos racistas de forma continuada, con Vinicius como objetivo de ellos de forma habitual. No se descarta que se amplíe a duelos de otros equipos, pero de momento no se considera necesario. LaLiga tiene entre ceja y ceja acabar con este problema y quiere hacerlo infiltrando entre tres y cuatro espectadores en las gradas más conflictivas de cada estadio para que detecte los insultos en el momento en que se producen e identifique a los autores de los mismos.
Porque este asunto, el de la identificación, es vital. Hay dos casos que lo ilustran claramente: en 2020, un aficionado del Espanyol insultó de forma xenófoba a Iñaki Williams, fue identificado y el proceso se encuentra ahora con la fiscalía pidiendo dos años de cárcel, una multa de casi 6.000 euros y cinco años de prohibición para entrar en recintos deportivos; sin embargo, en octubre de 2021 Vinicius recibió insultos racistas por parte de un aficionado del Camp Nou y, pese a que fue grabado por las cámaras de televisión con claridad, la fiscalía archivó la causa, pues los Mossos argumentaron que no les fue posible localizar al autor de los insultos.
Cierre de gradas y multas
Es el esfuerzo más novedoso de LaLiga en este sentido, pero no el único: Javier Tebas ya envió a todos los presidentes de Primera y Segunda una carta en la que les pedía máxima contundencia para combatir este problema y que identificasen a sus aficionados sin dilación, al mismo tiempo que animaba a los clubes de los jugadores insultados a sumarse a las denuncias. También se ha abierto un buzón de correo electrónico (StopRacismo@laliga.es) para que cualquier aficionado que lo desee denuncie situaciones de este tipo.
Y, para evitar discrepancias con la fiscalía y agilizar los procesos, se ha pasado de informar al Comité Antiviolencia de los hechos a que sea LaLiga quien los denuncie directamente en los juzgados de instrucción, como sucedió en Valladolid y en Mallorca. El siguiente paso es endurecer los castigos: LaLiga quiere ver gradas cuando sucedan estos hechos, aunque ello sea competencia del Comité de Competición de la RFEF. Además, se denuncia cada hecho ante la Comisión Antiviolencia para que proponga las multas que considere.