Sotelo, el heredero de Veiga
El canterano se estrenó como titular en Primera ante Osasuna. Realizó una gran pretemporada, en la que convenció a Benítez hasta entrar en el once.
Con Gabri Veiga haciendo las maletas para viajar en los próximos días rumbo a Nápoles, Luís Campos está rastreando el mercado en busca de un sustituto para la joya de O Porriño. Sin embargo, el heredero natural de Veiga está en casa. Se trata de Hugo Sotelo, el futbolista que ha enamorada a Rafa Benítez en pretemporada gracias a su desparpajo, su enorme personalidad y su valentía sobre el césped, unas cualidades que también se le pueden atribuir al centrocampista porriñés.
Veiga y Sotelo comparten posición en el terreno de juego, si bien es cierto que no son futbolistas parecidos. Si Gabri destaca por un poderío físico que le permite recorrer el campo de un área hasta la otra, Hugo brilla por su buen posicionamiento, una inteligencia táctica que le permite estar siempre en el sitio adecuado. Mientras Veiga lleva el gol en la sangre, siendo la temporada pasada el centrocampista más anotador de la Liga, Sotelo sonríe dando asistencias, algo en lo que destaca gracias a su privilegiada visión de juego y su depurada técnica. Mismo puesto, distintos roles.
Los dos canteranos llevan vidas paralelas en el primer equipo. Los dos debutaron a la temprana edad de 18 años y lo hicieron con victoria, una juventud que en ningún caso se palpó sobre el terreno de juego. La primera titularidad en la máxima categoría también les llegó pronto, un estreno agridulce porque los dos se estrenaron con derrota.
Veiga consiguió explotar el año pasado gracias al veto del club a Denis Suárez y después logró imponerse a uno de los grandes fichajes, como Óscar Rodríguez. Sotelo puede beneficiarse ahora de la salida de Veiga y, de momento, está por delante de un fichaje como Dotor. La incógnita reside ahora en la decisión del club, si tomará el camino de firmar un relevo en el mercado o directamente le entrega el testigo a Sotelo.
Sea como fuere, ya no hay quien le quite la sonrisa a Hugo Sotelo: “Lo más inolvidable siempre es debutar, pero jugar de inicio es mucho más significativo, me hizo más ilusión. Aún por encima hacerlo en un año tan especial como el del Centenario, escuchar el nuevo himno cuando saltas al campo... Se me puso la piel de gallina”. El centrocampista reconoce que la pretemporada ha sido vital para dar el salto: “Creo que vengo trabajando bien, me noto más cercano a mis compañeros y eso se ve reflejado en el terreno de juego, me siento más cómodo”.