Sampaoli convence con el micrófono

Los partidos no se ganan en las conferencias de Prensa, pero seguro que desde la palabra se puede comenzar a sembrar ambiente, ilusión, incluso fútbol. Con Lopetegui engullido por las circunstancias y enrocado en una manera de jugar, una de las cosas que más se le seguían criticando al entrenador vasco eran la opacidad y un discurso prácticamente plano cuando se ponía delante de los micrófonos.

Frases hechas como “sana intención”, “partido importante” o “rival difícil” surgían casi en el cien por cien de las apariciones públicas de Julen, sobre todo en las de antes de los partidos. Más allá de los cambios sobre la pizarra o en la motivación del vestuario, que también los hay, de Sampaoli ha gustado dentro del club y alrededores la transparencia y claridad con la que habla cuando comparece ante los medios.

El argentino no suele guardarse nada, ni siquiera en el tema de las lesiones, sobre el que Lopetegui también mantenía, tal vez porque lo creía bueno para el resultado, cierta omertà. Desde que llegó, Sampaoli no ha enmascarado nunca las dificultades para rehacer el equipo, ni tampoco se esconde de partidos o trozos de encuentro de fútbol escaso como la segunda parte ante el Athletic, la primera contra el Valencia o el duelo completo, en su única victoria hasta el momento, de Mallorca.

Sampaoli, eso sí, llega al Bernabéu sin haber perdido en cuatro partidos oficiales, que ha saldado con tres empates y ese triunfo conseguido en Baleares (0-1) con golazo de Nemanja Gudelj. El futbolista serbio, renacido bajo la batuta del técnico argentino a pesar de que a priori no era uno de sus favoritos, parece convencido de la nueva idea que mana del banquillo sevillista.