Sabaly, factor sorpresa

El Betis mira de reojo todo lo que ocurre en Qatar con la esperanza de que sus futbolistas sigan dejando muestras de brillantez. Uno de los focos se coloca sobre la figura de Youssouf Sabaly, que logró el pase a los octavos de final con Senegal y está cumpliendo con las altas expectativas que había sobre él. No resulta diferencial en el juego de los suyos, pero su papel es intocable y lo jugó todo de momento desde ese lateral derecho. Su rendimiento despierta los aplausos desde Heliópolis. Y la esperanza es que siga reflejando ese estado de forma ilusionante y trasladarlo de vuelta a su equipo cuando se cierre su ciclo en Qatar.

Había dudas sobre cómo llegaría Sabaly a la cita mundialista. Jugó desde el inicio de campaña sólo 676 minutos con el equipo bético y atravesó varios capítulos de lesiones desde el verano. Pero su recuperación parece total tras esos diez partidos jugados con el Betis. Senegal cuenta con él como un fijo y eso puede entregarle mucha confianza de cara a continuar con un buen nivel en lo que resta de campaña. Su reto es claro: tiene entre sus miras hacer historia con su selección y tras ello ganarse de nuevo la confianza de Manuel Pellegrini.

Hay muchas miras puestas en las dificultades existentes en torno a esa posición del carril diestro en el equipo bético. En verano fue imposible gestionar la llegada de Héctor Bellerín y nadie confía en que haya opciones en el próximo mercado de invierno. Con Martín Montoya contando mucho menos para el técnico, la solución apareció de forma improvisada de la mano de Aitor Ruibal. El canterano se hizo con un sitio en esa posición cuando las necesidades lo demandaron y su rendimiento fue notable. Pellegrini celebra el buen nivel de sus laterales a la espera de que Sabaly regrese y que el club, quizás, le entregue alguna sorpresa.