Rodri, el chico de La Masía al que tienta la Serie A

Rodri Sánchez encara un partido especial por muchos motivos. El jugador del Betis tendrá enfrente al Barcelona, club por el que pasó hace años, y también el desafío de recuperar ese nivel de juego perdido que le quitó peso en el actual esquema de juego de Manuel Pellegrini. Una doble carta para un jugador que está muy presente en el mercado y es pretendido por varios clubes desde hace meses. Su futuro está, de nuevo, en el aire. Ya lo estuvo el pasado verano cuando brilló a los mandos de la selección española Sub-21, pero tanto el Betis como Pellegrini frenaron su posible marcha entregándole un hilo de confianza que ahora atraviesa un amago de crisis.

Rodri llegó en 2014 al Barcelona, pero su periodo en La Masía no se sostuvo en el tiempo. Allí conoció a Juan Miranda, compañero de habitación entonces y ahora. Quedaba perplejo cuando el lateral convencía a la gran mayoría de niños de la residencia para que vieran los partidos del Betis en el salón. También vio los primeros pasos de Ansu Fati mientras él trataba de encontrar una estabilidad en minutos que no obtuvo allí. Tampoco termina de encontrarla en el presente pese a que su idilio con el Betis fue total. Pellegrini siempre insistió en que él es el futuro del equipo bético. Tiene 23 años y la experiencia de su lado. Pero quiere más tiempo de juego. Sin eso no puede mostrar ese fútbol valiente que lo convirtió en una de las figuras de la Sub-21 de De la Fuente.

Rodri vio minimizados sus minutos en las últimas semanas. Su papel pasó de ser protagonista a ser secundario por la gran competencia en esa línea de tres cuartos. Su polivalencia le abría huecos en numerosas posiciones, pero sus apariciones esporádicas en los partidos no terminan de abrirle la puerta al once. Su sitio más natural es el situado por detrás del delantero. En sus primeras campañas tuvo que ver cómo Nabil Fekir reinaba en esa zona del campo y esta campaña visualiza el enorme talento que impone Isco desde ese mismo sitio. Él se acopla a cualquiera de las bandas, pero ahí sus recursos son diferentes y lo sabe Pellegrini, que busca más velocidad y desborde con piezas como Assane Diao y Luiz Henrique.

En las últimas semanas, la Serie A volvió a posar los focos sobre él. La Fiorentina sigue la estela que ya expuso el Nápoles el pasado verano. Fue cuando Rodri defendía la camiseta de la selección española Sub-21 y reflejaba en el Europeo un puñado de virtudes que no pasaron desapercibidas para muchos clubes. El Betis lo tiene claro: necesita mejorar los números de sus arcas y no se opondría a un traspaso del de Talayuela. Por mucho que Pellegrini crea en él. Por mucho que su fútbol, el que limó en La Masía, amague con mucho más de lo que refleja.

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