BARCELONA-REAL MADRID | ABELARDO
“Lo de Bellingham es brutal”
Abelardo y Mijatovic visitan AS para analizar el Clásico de este sábado. El gijonés apuesta por un 2-1; el montenegrino, por 1-2. Tienen claro a quién ficharían del rival: a Valverde y a Gavi.
Este sábado hay Clásico en LaLiga. El número 255 en la historia. Barça y Madrid se reencuentran después del 3-0 a favor de los de Xavi, el pasado 29 de julio, en el amistoso de la gira americana. Ahora es otra historia. Separados por un punto, el Madrid llega como líder y el Barça, tercero. Si ganan los de Xavi, habrá sorpasso en el primer puesto, siempre que el Girona no gane al Celta. Si los de Ancelotti se imponen, afianzarán su supremacía. Y encima se juega en un escenario circunstancial. Montjuïc es la nueva casa del Barcelona, hasta que esté listo el nuevo Camp Nou. Es un Clásico muy especial por tanto. Y para analizarlo, AS invita a dos exfutbolistas de primer nivel que vivieron cuatro Clásicos con las botas puestas: Abelardo y Mijatovic.
El Clásico
El análisis de Abelardo para el Barça-Madrid parece abocado a un empate o una diferencia mínima en el marcador: “Va a ser muy igualado y, sobre todo, muy táctico. Se va a resolver por pequeños detalles. La clasificación no importa y cómo parece que lleguen, tampoco, porque yo he jugado Clásicos en los que llegábamos mejor y perdimos, y al revés. Veremos si Xavi pone a los jóvenes en función de a quién recupera. Apuesto por un 2-1″. Mijatovic vaticina un resultado de “1-2″, pero no se muerde la lengua con el Madrid: “Gana partidos, pero no me gusta cómo juega. Tiene bastante desorden y me explico: Ancelotti ha tenido bastante éxito con el sistema con el que ha jugado siempre en el Madrid, pero este año lo ha cambiado para dar cabida a Bellingham y a gente joven. De momento, está saliendo bien, pero a ver cuánto dura. Yo creo que él no cree en este sistema y hace cosas que no me gustan”. Paralelamente al análisis de uno y la crítica del otro, ambos invitados auguran un partido “emocionante entre los dos mejores equipos del mundo”, ensalzan la plantilla del rival y sobre qué jugador ficharían del otro equipo, Abelardo lo tiene claro: “A Valverde”; y Mijatovic tampoco duda: “A Gavi”.
Rivalidad
Barcelona y Real Madrid son vasos comunicantes. La rivalidad no es sólo deportiva, sino sociológica y hasta cultural. Abelardo y Mijatovic han vivido la rivalidad de un Clásico cuatro veces en sus carreras, pero también han sufrido otras. “Cuando yo estaba en el Partizán, la rivalidad que había con el Estrella Roja era tremenda, una locura. Cuando perdías un derbi y al día siguiente ibas a un restaurante, como no hubieras dado el máximo, te tocaban las narices, te insultaban, te amenazaban...”, dice Mijatovic. Y Abelardo desvela cómo es la del Sporting y Oviedo. “La rivalidad se lleva hasta niveles impensables: sucedió un año que en las fiestas de Gijón fue Bruce Springsteen a dar un concierto y Oviedo contraatacó con Michael Jackson”.
Primer cara a cara
Abelardo y Mijatovic se han enfrentado 10 veces como futbolistas. Pero antes de encontrarse en los Clásicos, se vieron por primera vez las caras, siendo unos veintañeros, en la Copa de la UEFA. Corría el año 1991 cuando el sorteo emparejó al Sporting de Gijón y al Partizán de Belgrado. “Les ganamos 2-0 en el Molinón y después lo igualaron en Estambul (la vuelta no se jugó en Belgrado por el bloqueo que recaía sobre Serbia por la guerra de los Balcanes), pero pasamos por penaltis. Ciriaco Cano, que entonces era el entrenador del Sporting, ya conocía la calidad de Mijatovic y le encargó un marcaje individual a Alcázar, que luego jugaría en el Rayo”, recuerda Abelardo. Mijatovic apostilla: “Fue mi bautismo en competiciones continentales de clubes. Teníamos una gran plantilla (Jokanovic, Zahovic, Vasiljevic o Brnovic, entre otros, jugaron en España). Si hubiera sido en Belgrado, hubiésemos pasado...”. Y es que el autor del gol que dio la Séptima Copa de Europa al Madrid recuerda lo que supuso la guerra y sus consecuencias para aquella generación de jugadores serbio-montenegrinos: “No nos dejaron competir el Mundial’94 ni la Eurocopa’96. Mi primer gran torneo con la selección fue el Mundial de 1998 y yo ya tenía 29 años”. Pedja bromea con la cantidad de pasaportes que tiene: “Llegué a España como yugoslavo, después fui serbio-montenegrino, luego montenegrino y ahora español”. Y Abelardo continúa con un chascarrillo que a muchos habría hecho felices de llegar a ser una realidad: “Qué pena que no hubiera sucedido ahora y pudieras jugar con la Selección española”.
El Barcelona enredó
Mijatovic relata que, antes de fichar por el Madrid, “me tocó el Barça. Cruyff me quería. De hecho, mantuvimos conversaciones, pero no coincidíamos en lo que yo pedía y lo que me daban: mi demanda era dos millones de dólares y ellos decían que era mucho dinero, que Stoichkov, que era de los mejor pagados, cobraba 1,7 y que no podía ser. Cuando llegó el partido entre el Valencia y el Barça en Liga, yo estaba supermotivado. De hecho, ganamos y yo marqué dos goles. Pero tres días después del choque, me llamó el agente Santos Márquez y me dijo que el Madrid también me quería y su idea era venir a mi casa a reunirse conmigo. Y así fue. Después del partido ante el Barça, un domingo, llamó a mi puerta el entonces vicepresidente Ignacio Silva y lo cerramos todo. Pero es que después de fichar por el Madrid, Van Gaal, que había llegado al Barça, dijo que el club me tenía que contratar. Se lo dije a Lorenzo Sanz. Al principio no me creyó y dos días después me mandaron un avión a Montenegro, donde yo estaba de vacaciones, para renovarme un año más con la famosa prima de Champions”. A Abelardo también le preguntamos si el Madrid le llegó a sondear: “No, nunca, pero si hubiese pasado, a mi abuelo materno le hubiera hecho muy feliz, porque era muy madridista, era un devoto de Di Stéfano. Cuando vino el Barcelona a por mí, sólo me decía: ‘Seguro que el Madrid no te ha llamado...”.
Ruido arbitral
Mijatovic no cree que todo el ruido existente por las actuaciones arbitrales en este arranque de Liga “vaya a influir en los jugadores de cara al Clásico. Es más a nivel mediático e institucional. Yo, cuando jugaba, muchas veces sabía quién era el árbitro el mismo día del partido, y a veces ni eso; la verdad es que nos importaba poco. A nosotros lo que nos interesaba era darlo todo y ganar. Igual que ahora”. Y entonces la pregunta a los dos invitados es obligada: ¿qué opinan del ‘caso Negreira’? “Lo que sé es por lo que leo y escucho en los medios de comunicación, pero si el pago es por unos informes, me parece una torpeza, y encima han imputado a Laporta... No sé, parece todo muy raro”, afirma Abelardo, a lo que Mijatovic subraya: “El escándalo, que lo es, se hace peor por la imagen del Barça y del fútbol español en general a nivel internacional. Yo, lo de la influencia sobre los árbitros, no lo creo. Para mí, el cuerpo arbitral español es el más honesto de toda Europa”. Y sale a relucir, a propósito de las últimas declaraciones de Laporta por su imputación en el ‘caso Negreira’, el término que ha acuñado de “madridismo sociológico”: “Como leitmotiv está bien, pero seguro que haces una encuesta entre los jugadores antes del Clásico sobre si les importa lo del madridismo sociológico y a la mayoría, por no decir todos, les da igual, pasan”, coinciden Mijatovic y Abelardo.
El Clásico de Figo
La rivalidad entre Barça y Madrid es crónica, aunque ha habido momentos en los que el recrudecimiento dio más que hablar. Por ejemplo, el Clásico de 2000, el primero de Figo con la camiseta del Madrid, en el que hubo récord de decibelios en el Camp Nou, y el de 2002, cuando le lanzaron la cabeza de cochinillo. “Yo nunca vi el estadio como aquellos días. Era tremendo. Daba miedo. Y luego todo lo que pasó en el partido. Yo, que tengo aún relación con él, sé que lo pasó muy mal. Ha habido otros trasvases de jugadores del Barça al Madrid y viceversa, como Laudrup, Luis Enrique, Milla, Schuster, Nando..., pero ni punto de comparación con las reacciones hacia Luis Figo”. Mijatovic recuerda un ambiente similar cuando fue a Mestalla siendo jugador del Madrid: “Todas las lindezas que me decían, amenazas...”.
Luis Enrique
Por aquello de que el actual entrenador del PSG y exseleccionador cambió el Real Madrid por el Barça, al contrario que Figo, Abelardo contó un dato, para muchos desconocido, sobre Luis Enrique, amigo suyo desde la infancia, el colegio y el barrio: “Sabéis que el Sporting nos echó a los dos en Infantiles. No valíamos. No teníamos físico, la verdad. De hecho, lo de mi apodo ‘Pitu’ era por pitufo, porque yo era bajito de pequeño, aunque después crecí 23 centímetros. Él se fue a un equipo llamado La Braña y yo, al Estudiantes, de un barrio de Gijón. Fuimos echando cuerpo, nos convocó la selección de Asturias, quedamos subcampeones de España y nos volvió a llamar el Sporting ya para el filial”. El entrenador gijonés enfatiza que Luis Enrique era “un gran jugador y ahora un técnico extraordinario”. Mijatovic va más allá: “Es un entrenador top. Ojo a lo que voy a decir, y se lo he dicho a Al Khelaïfi, si este año en el PSG son capaces de reconducir bien a Mbappé, es uno de los favoritos para ganar la Champions. Todos sus inicios en los equipos en los que ha estado han sido complicados y después han hecho grandes temporadas”.
Impacto Bellingham
El futbolista inglés, sin duda, va a ser uno de los nombres propios del Clásico de este áabado en Montjuïc. La joven estrella del Madrid estará en el foco, después de su aterrizaje apoteósico en LaLiga. Mijatovic se deshizo en elogios hacia Jude: “Yo a Bellingham lo conozco desde hace años y su salida tan joven de Inglaterra hacia la Bundesliga le ha hecho impregnarse de la mentalidad alemana de no rendirse nunca, de ser constante, de superarse a sí mismo, y es lo que estamos viendo en el Madrid. Su personalidad futbolística tiene más de alemán que de inglés, lo cual unido a su calidad le hacen ser un jugador al que ahora mismo no se le ve techo. El Madrid ha reaccionado muy bien al ficharle, porque todos los grandes de Europa le querían. Dice mucho de cómo es que haya aceptado la oferta del Madrid, porque sabe lo que le puede dar a nivel individual y colectivo, desechando ofertas que seguramente hubieran sido más rentables para él. Su impacto es extraordinario. Seguramente en su guion no entraba que hubiera empezado tan bien. Es un líder y lo está demostrando”. Abelardo no se queda atrás en sus piropos a Bellingham: “El impacto que está teniendo en LaLiga es brutal. Nadie pensaba que un centrocampista iba a ser el actual pichichi con ocho goles, 11 en total con los tres de Champions. El rendimiento que está dando en el Real Madrid es tremendo y gran parte del mérito es de Ancelotti, que ha sabido reinventar su sistema para buscar la posición más idónea para él, con libertad para su llegada en segunda línea que está haciendo estragos. Jugadores como él y Lewandowski la pasada temporada han realzado el nivel de Laliga después de la marcha de Messi y Cristiano”.
Haaland-Mbappé
Mijatovic ha sido una estrella de primer orden futbolístico y por eso es indicado para hablar de los jugadores, como ahora Bellingham, que acaparan más titulares y portadas en la prensa mundial: Mbappé y Haaland. “Haaland es un fenómeno futbolístico, es un nueve goleador, pero es noruego, nunca tendrá la imagen ni la repercusión de un francés. Yo, desde luego, si tuviera que fichar a uno me gastaría el dinero en Mbappé. Es un auténtico crack y, además, le acompaña el marketing alrededor de él, y en eso también se tiene que pensar”. Abelardo, que también ha jugado con figuras legendarias, interpela en cierta medida a Mijatovic: “Es que Haaland no sólo es un rematador, y lo digo yo que he sido central, además de definir, crea juego, abre espacios para las llegadas desde segunda línea... Es muy completo”.