Fran Mérida abandona el Espanyol, tras los pasos de su hermana Sara
El mediocentro acababa contrato tras un año sin apenas jugar en el Espanyol, aunque tenía la opción de otro adicional, como Oier. Sara ha dejado el cuerpo técnico del Femenino.
Resultan caprichosos los designios del destino, que ha querido que durante dos años Fran y Sara Mérida compartan club, el Espanyol, y también que lo abandonen casi al unísono, con una diferencia de poco más de diez días. Sara, segunda entrenadora del Femenino A, anunció su salida como parte de la reestructuración del equipo tras frustrarse el retorno a Liga Iberdrola. Y ya iniciado julio es Fran quien deja el equipo masculino, sobrepasado incluso el contrato que finalizaba a priori el 30 de junio, aunque tenía un año opcional que obviamente no se ejecutará.
La andadura de Fran Mérida en el Espanyol es relativamente sencilla de explicar. Firmó libre en verano de 2020, tras el descenso, y en su primera temporada participó en 36 jornadas de Segunda División, la práctica totalidad. Pero con el retorno a Primera, este último curso apenas sumó 262 minutos, repartidos en diez partidos, de los que solo tres veces fue titular. “Tampoco hay que ser adivino. Mi participación este año ha sido escasa y buscaré otro sitio donde pueda seguir mi carrera”, manifestaba él mismo, el pasado 6 de mayo, en el Diario de Navarra. Tal como ocurrió en el caso de Oier Olazabal, el club no ha considerado oportuno aplicar la temporada adicional que se había firmado.
“Me hubiese gustado seguir en la que siempre consideraré mi casa, pero hay decisiones que no están en mi mano, por lo que tengo que abandonar el club de mi corazón”, escribía en este caso Sara Mérida en las redes sociales el pasado día 20, quien desde su retorno al Espanyol en 2018 había pasado por las ocupaciones de readaptadora, preparadora física y, finalmente, segunda entrenadora.
Pero es que en su etapa de futbolista, ya consiguió conquistar como perica la Copa de la Reina en 2009 con solo 16 años, y nuevamente en 2011, cuando ya había sufrido la primera de las cuatro roturas del cruzado que la llevaron a retirarse prematuramente. Y entre medias, se proclamó campeona de Europa con la Selección española Sub-17. Si se habla del Espanyol como un club familiar, Sara y Fran Mérida son un ejemplo literal. Una etapa que se cierra.