El ordenador espanta a Braulio
Entre otras razones económicas, el director deportivo gallego prefiere quedarse en Osasuna porque no acepta la forma ‘digital’ de trabajar con IA del Sevilla.
El ordenador, la Inteligencia Artificial y el Big Data, según por donde se mire, han sido el gran obstáculo para que Braulio Vázquez no acepte la oferta del Sevilla para sustituir a Monchi. El club nervionense quería contratar al gallego pero con varios condicionantes, entre ellos que aceptase fichar y trabajar teniendo muy en cuenta el departamento de IA que montó el gaditano en Nervión, con una base de datos de más de 20.000 futbolistas.
La del Big Data no ha sido ni será la principal forma de trabajar de Braulio, más acostumbrado a otras maneras más ‘tradicionales’ de reclutar jugadores durante sus etapas como director deportivo en el Valencia, el Valladolid y ahora, Osasuna. El todavía responsable de fichajes rojillo no se ha querido plegar ante esa exigencia.
Ni ante otras. Lo de no poder llevar más de un estrecho colaborador pesó, sí, pero no como lo de la IA ni el plano económico... a posteriori. El Sevilla estaba dispuesto a más que duplicar el sueldo que Braulio cobraba en Osasuna y a darle tres años de contrato, pero sin querer hipotecarse. Desde que se pagaron los millonarios finiquitos de Lopetegui y Sampaoli, la intención sevillista es no atarse en cuanto a lo económico con ningún otro trabajador de ese estilo como puede ser un director deportivo.