El árbitro que ‘saca de quicio’ al Espanyol y al Cádiz
Hernández Hernández será el encargado de dirigir el encuentro de este domingo. Le acompaña una estadística funesta: los blanquiazules solo ganaron un partido de los 16 que les ha dirigido.
Alejandro José Hernández Hernández (Las Palmas, 39 años) empezó a arbitrar al Espanyol en la temporada 2012-13 en un partido histórico en la etapa jugada en el RCDE Stadium. Un 0-2 ante el Getafe que supuso el despido inmediato de Mauricio Pochettino como técnico blanquiazul después de tres campañas y media en las que dejó huella en la entidad a todos los niveles, rescató a un Espanyol deshauciado en 2009 e hizo la primera transición apoyándose en la cantera justo al cambiar de estadio y de presidente. No fue el mejor comienzo para un colegiado que ‘saca de quicio’ al Espanyol.
Lo dictan sus datos, casualidades del arbitraje. El Espanyol solamente ha ganado uno de los 16 encuentros que les ha dirigido el canario, y fue en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante el Alavés en la campaña 2014-15, encuentro que finalizó 1-0 con tanto de Jairo Morillas. Después de eso, empates y derrotas de todos los colores, la última aconteció en la jornada 38 de la pasada campaña en los Nuevos Cármenes de Granada, un 0-0 que mandó a los nazaríes a Segunda División después de que Jorge Molina fallara un penalti, para más dramatismo.
El Espanyol ha cosechado nueve derrotas con Hernández Hernández, algunas de ellas muy dolorosas, como el 6-0 ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu en la campaña 2015-16; el mismo 2-1 en el Ciutat de València ese mismo curso a falta de cuatro jornadas o el 1-3 del Girona en la temporada 2018-19 que inició una racha negativa que estuvo a punto de erosionar la trayectoria de Joan Francesc Ferrer, Rubi. El empate más doloroso fue el derbi de la temporada anterior, resuelto en el minuto 97 de partido por un tanto de Luuk de Jong que supuso el 2-2 definitivo.
Tampoco tiene buen recuerdo el Cádiz del colegiado canario desde el encuentro de la temporada anterior en Mallorca, cuando desde el VAR Hernández Hernández instó al colegiado principal Del Cerro Grande a señalar un penalti a favor de los bermellones que fue inexistente: la inexplicable infracción pitada a Conan Ledesma tras su fortuito golpe con Ángel Rodríguez en el momento en el que el arquero despejaba de puños un centro de Salva Sevilla. Una jugada que nunca se señala como penalti debido a que se entiende que el portero utilizó la rodilla para proteger su radio de acción. Ni unos ni otros tienen grandes recuerdos con el canario, encargado de un partido vital para ambos equipos este domingo.