Arranca la ‘era Endrick’

Está cerrado (15 de diciembre de 2022), pero no firmado. Y eso sucederá hoy. Seis días después de cumplir los 18 años, Endrick acudirá a Valdebebas y, junto a Florentino, estampará su rúbrica. Punto final. Y punto de partida: habrá nuevo delantero en Chamartín. Un chico cuyos primeros pasos fueron en Taguatinga, un humilde distrito de la capital; un futbolista cuyos primeros goles fueron en Palmeiras. Zurdo y bajito (1,73 metros), pero con una velocidad y, sobre todo, una potencia que impacta. El Madrid se lleva a un diamante que ya ha dado el salto a la Canarinha. Un delantero de presente y futuro. Firma hasta 2030 y llevará el 16. El día de Éndricki, porque así se pronuncia su nombre, es hoy.

Su cláusula era de 60 millones, pero Real Madrid y Palmeiras pactaron un acuerdo que flexibilizase el pago, repartiéndolo en el tiempo y evitando un enorme desembolso este verano. En Chamartín han pagado 35M€ fijos, quedando los otros 25M€ pendientes de variables. Muchas de ellas, tan factibles que son una mera cuestión de tiempo (cierto número de titularidades, goles, títulos...), pero hay otras más ambiciosas (ganar el Golden Boy, por ejemplo). Es un delantero de mucha movilidad, que tiende a caer a los costados, rapidísimo para atacar espacios y peligroso en conducción. No es un rematador nato, un killer del primer toque, pero tiene mucho gol. Mucho fútbol. Y muchísimo futuro.

¿Por qué Endrick no podía llegar hasta los 18 años?

Por la normativa FIFA de protección al menor. En concreto, su artículo 19: “Las transferencias internacionales sólo se permiten cuando el jugador alcanza los 18 años”. Uno que tiene varias excepciones, pero ninguna le salvaguardaba. Se permitirá si “la transferencia se efectúa dentro de la Unión Europea (UE) o el Espacio Económico Europeo (EEE)” o “entre dos asociaciones dentro del mismo país”. El primer supuesto, por ejemplo, es el que permitiría a Mastantuono llegar a Chamartín antes de los 18 años, pues cuenta con pasaporte italiano. Pero Endrick nunca pudo. Debía esperar a los 18 años... y eso fue el 21 de julio, domingo pasado.

De los vídeos de su padre, al Bernabéu

Teniendo sólo cuatro años, el padre de Endrick comenzó a publicar vídeos de su hijo jugando con un balón. Era un hobby, prácticamente una rutina habitual en un padre orgulloso. Pero en esos vídeos al pequeñajo ya se le veían destellos de talento. Llamaban la atención. Tanto, que tres gigantes de Brasil acabaron contactándolo para incorporarlo a sus canteras: Palmeiras, Santos y Corinthians. Un pulso que ganó el primero, contratando, además, a su padre para trabajar en las instalaciones del club. Con 11 años, Endrick empezó a jugar en el Verdão... y a reventarlo. Antes de los 16 ya había roto el récord de goles de todas las inferiores y es el primer jugador en toda la historia del club que gana títulos en todas las categorías: Sub-11, Sub-13, Sub-15, Sub-17, Sub-20 y Primera.

Porque esta última ha sido la guinda: campeón de Liga con el primer equipo. Un salto a la élite que comenzó el 7 de octubre de 2022, debut teniendo sólo 16 años: Abel Ferreira le dio 21′ en el 4-0 al Coritiba. Era una joya. Un jugador que brilló como un astro en la Copinha (el torneo Sub-20 de Brasil, habitual escaparate mundial de diamantes), anotando seis goles en siete partidos y siendo elegido mejor jugador del torneo. De ahí, al primer equipo. Donde ha ido creciendo, aprendiendo, corrigiendo errores. Tuvo tramos de suplencia, señalado de una inevitable falta de madurez –no dejaba de tener 16 años–, pero nadie negaba que era una cuestión de tiempo. Y poco a poco ha ido asentándose, hasta marcharse con 21 goles en 82 partidos (uno cada 219′).

Aquel 2022 comenzó el pulso europeo por hacerse con su fichaje: Barcelona, PSG y Chelsea, los más interesados. En febrero, el jugador agitó el runrún subiendo una foto en el Camp Nou, acompañado de dos corazones, colores azulgranas (presenció el Barcelona-Nápoles de Europa League). Antes, había estado conociendo las instalaciones del Chelsea, tal y como confirmó su agente, Frederico Pena (que es también el de Vinicius). Y entre medias, el PSG irrumpió a golpe de talonario: ofreció 80M€ por Estêvão, la otra gran perla de aquel Palmeiras y él. No lo tuvo fácil el Madrid, había mucha competencia.

La intervención de Vinicius

Pero ganó. Uno de los factores cruciales fue la irrupción de Vini, que telefoneó a Endrick para charlar con él, tranquilizar sus nervios y acercar posturas. Actualmente son muy amigos. Y la segunda, su preferencia por el Real Madrid. Es donde quería ir, aunque supusiese aceptar una oferta menor. Los clubes fueron acercando posturas y en diciembre de 2022, fumata blanca: acuerdo cerrado. El fichaje se emplazó a partir del 21 de julio, cuando cumpliese la mayoría de edad y, mientras tanto, continuaría “su formación” en Palmeiras.

En este último año y medio ha ofrecido tal rendimiento, que ha llegado a la Selección Brasileña (con 17 años, tres meses y 27 días, es el cuarto debutante más joven de la historia de la Canarinha, sólo por detrás de Pelé, Edú y Coutinho). Para enmarcar, sus dos primeros goles: en Wembley para ganar a Inglaterra (0-1) y en el Bernabéu, frente a España (3-3). Su padre rompió a llorar con este último. Ese pequeño del que subía vídeos con cuatro años, había anotado en Chamartín. Donde jugará a partir de hoy.

Directo al primer equipo

Endrick llega para formar parte del primer equipo, sin escalas en el Castilla. Jugadores como Rodrygo o Vinicius vivieron esa transición hasta el Bernabéu pasando por el Di Stéfano. Pero no será el caso de Endrick, cuya incorporación ‘a los mayores’ será directa. En el club se le ven mimbres suficientes para este desafío y, por si aún quedaba alguna pequeña duda, la salida de Joselu (rumbo a Qatar) refuerza la necesidad de un delantero. Es más, una vez que ha salido el cuñadísimo, el panorama se allana para Endrick, con menos obstáculos hacia los minutos. Tendrá ficha de primer equipo y ejercerá como tal. Sin medias tintas.

En diciembre de 2023 ya se desplazó a Madrid para conocer la Ciudad Deportiva y saludar a sus futuros compañeros. Bromeó con Rodrygo, charló con Bellingham y conoció a Ancelotti. A todos. “Viene para quedarse en el primer equipo, no hay duda”, dijo Carletto en rueda de prensa, esbozando una media sonrisa que delataba su ilusión en el futbolista. Endrick aprovechó esa estancia para ver casas.... y fue invitado por el club para presenciar, desde el palco, la victoria ante el Villarreal (4-1, la noche de la lesión de Alaba). Fue conociendo y dándose a conocer.

Dorsal ‘16′

Es con el que empezó en Palmeiras. Se dio una circunstancia curiosa: teniendo 16 años, escogió el 16. Durante casi dos años fue su dorsal, hasta que el 9 quedó libre y dio el salto. En estos momentos es el que lleva en Brasil, sin miedo ni vértigo. Pero no podrá mantenerlo en Chamartín: Mbappé, al no poder coger el 10 (pues continúa en propiedad de Modric), activó su ‘Plan B’ y lucirá el 9. Así se inicia un efecto dominó que también afecta a Endrick. Escoge el 16.

Presentación: a las 12:00h

El fichaje, cerrado desde hace año y medio, será hoy definitivo. Cuenta atrás para la firma. El nuevo delantero del Real Madrid, ese chico que acaba de cumplir los 18 años, será presentado a las 12:00 horas en el Santiago Bernabéu. Apenas quedan entradas (como en la presentación de Mbappé, han sido gratuitas con preferencia a los socios), aunque se espera una asistencia que ronde los 60.000 espectadores. Antes se someterá al reconocimiento médico y firmará en Valdebebas. Y después, rueda de prensa en el estadio.

Es el día del niño. Y todo sucede un día antes de que el equipo se suba al avión rumbo al stage de Estados Unidos: mañana, sobre las 16:00 horas. Él se subirá al avión junto al resto de la expedición. “El Real Madrid no fue una elección, sino un sueño”, dijo en su entrevista exclusiva con AS. Endrick, pronunciado Éndricki, será hoy jugador del Real Madrid a todos los efectos. Llega un diamante. El 9 de la Canarinha. Un chico que, seis días después de cumplir los 18 años, fue a las oficinas a firmar su contrato. Hoy. El fin a la espera. El principio de todo.