Tranquilidad con la lesión de Oyarzabal
El eibarrés regresa este viernes a Donostia y el sábado le harán pruebas los médicos del club txuri-urdin. No se espera que sea una lesión muscular grave, por las sensaciones que ha transmitido el propio jugador, que sólo tiene una pequeña molestia.
La Real Sociedad espera noticias, con relativa preocupación, de la Federación Española de Fútbol. Quiere saber cuanto antes el diagnóstico de los médicos de la Selección para ponerse a trabajar en la recuperación de Mikel Oyarzabal, aunque lo que les han dicho es que no debe ser una lesión muscular de gravedad. Porque cuando el capitán del club txuri-urdin se ha lanzado al suelo para intentar rematar un balón dentro del área y enseguida se ha echado la mano a la parte posterior de su muslo derecho, saltaron todas las alarmas en Zubieta. Corría el minuto 40 del partido de España contra Chipre. Oyarzabal estaba destacando con un gol y una asistencia. Hasta que se lesionó. Pero hay tranquilidad en la Real con la lesión de su capitán.
El eibarrés regresa este viernes a Donostia y el sábado le harán pruebas complementarias los médicos del club txuri-urdin. No se espera que sea una lesión muscular grave, por lo que les han dicho desde la Selección y por las sensaciones que ha transmitido el propio jugador, que asegura tener sólo tiene “una pequeña molestia”. Se trata de una lesión muscular, pero hay que determinar el alcance de la dolencia. La faena es que Oyarzabal vuelve a lesionarse cuando estaba otra vez en su mejor momento, una vez dejado atrás el largo proceso de recuperación de la rodilla que se rompió, habiendo marcado diez goles en los últimos doce partidos que había jugado el eibarrés. La mala suerte vuelve a cebarse con el capitán de la Real Sociedad. Con todo, por estalbecer una comparativa, no es una lesión muscular como la de Kieran Tierney esta misma temporada, que le tiene de baja desde hace más de mes y medio, y todavía no ha regresado a los terrenos de juego.
Oyarzabal se quedó tendido sobre el terreno de juego y enseguida fueron a preocuparse por el sus compañeros de la Selección, como Mikel Merino, con el que también comparte club. Oyarzabal se tocaba la zona del isquio derecho y con cara de preocupación, le decía al médico de la Selección: “He notado un pinchazo”. Era la confirmación de que algo no iba bien. Seguro que al doctor de la Real, Javier Barreda, se le heló la sangre. El jugador txuri-urdin tiene abandona este viernes la concentración de la Selección para volver a Zubieta y que pueda ser examinado por su club, la Real. Ahí ya se determinará la gravedad de la lesión muscular, dependiendo de los resultados de las pruebas que se le vayan a practicar, todo hace indicar que este sábado, porque llegará ya de noche a San Sebastián.
De entrada, hay preocupación, por con la carga de partidos que tiene el equipo donostiarra; pero es relativa, porque no será una lesión muscular de gravedad. Con todo, a nada que necesite dos o tres semanas, que suele ser lo habitual en roturas de fibras, puede perderse unos cuatro partidos con la Real: Sevilla y Osasuna de liga, Salzsburgo en Champions, y Andratx en Copa. Quizá pueda estar recuperado para la visita a la Cerámica contra el Villarreal, y podría estar disponibles para el viaje a San Siro contra el Inter de Milán. Dentro de lo malo, lo bueno es que se gana una semana al no haber partido este fin de semana, y eso juega a su favor para perderse los menos encuentros posibles con el equipo realista. Son previsiones, teniendo en cuenta que no parece algo grave. Con todo, habrá que esperar a las pruebas médicas complementarias, rezando para que sea lo menos posible. Porque Oyarzabal es el capitán y el alma de esta Real Sociedad de Imanol Alguacil.
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