BRASIL

Pablo Maia, de la Copinha a dominar el Brasileirao

El centrocampista de 20 años inició el año disputando la Copinha y lo termina como uno de los mejores centrocampistas del Brasileirao. Un box to box formidable.

Pablo Maia era un completo desconocido en el mes de enero. En esa fecha este centrocampista de múltiples facetas para convertirse en un jugador de élite disputó la Copinha con Sao Paulo, donde alcanzó las semifinales para caer con el Palmeiras de Endrick y Giovani. Apenas 10 meses después se ha convertido en uno de los nombres más destacados en diferentes estadísticas dentro del Brasileirao.

El propio club paulista ha destacado esa inusitada progresión de un jugador que ocupa uno de los puestos del campo que requiere de más experiencia en una cancha. Sin embargo, para el joven de 20 años no ha sido un inconveniente el salto de nivel desde el fútbol a base a cotas tan altas como la final de Copa Sudamericana que se llevó Independiente del Valle, quizá el día más triste en este 2022 de ensueño para él.

Pablo Maia destaca por su seguridad en el pase, tanto en el inicio de la ofensiva como en situaciones más adelantadas del juego. Abarca muchos metros y en la gráfica ofrecida por BeSoccer Pro se puede observar como puede ocupar cualquier sector del centro del campo. Dentro de su crecimiento se puede imaginar un futbolista que de dar el salto al fútbol europeo sería una pieza muy útil por su versatilidad, tanto para jugar de pivote o como interior.

En cuanto a los números de este año, además de todos los que disputó con el equipo juvenil de Sao Paulo, a nivel profesional ya ha acumulado 62 partidos entre Paulistao, Brasileirao, Copa Sudamericana y Copa do Brasil. En estos partidos Maia ha participado de manera directa en cuatro goles. Ha anotado tres y ha repartido una asistencia. Una faceta en la que puede progresar.

No obstante, donde domina es en el desplazamiento de balón. Tiene facilidad para ser efectivo en el pase vertical y para romper líneas rivales. Además, tiene un don para la recuperación. Cuenta con una buena lectura de juego para aparecer en el lugar adecuado y robar la pelota.

Resulta muy llamativo como en apenas unos meses han aparecido en el fútbol brasileño jóvenes centrocampistas que cuentan con habilidades tanto ofensivas como defensivas y que prometen llegar a cotas muy altas. Desde Danilo en Palmeiras a Joao Gomes en Flamengo, André en Fluminense o el caso de Pablo Maia. Además, hay que seguir de cerca la evolución de Andrey, destacado con Vasco da Gama en la Serie B.

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