Ni rastro de Monchi ni en la portería ni en la medular

La salida de Marko Dmitrovic y Óscar, unidas a la llegada de Álvaro Fernández, confirmar que en esta segunda temporada como director deportivo del Sevilla, Víctor Orta si está logrando hacer un equipo a su gusto. De hecho, los cambios en la portería eliminan cualquier recuerdo del trabajo de Monchi, su antecesor, puesto que Nyland y Álvaro Fernández son fichajes de Orta. Bono fue traspasado el pasado verano y a Dmitrovic se le va a perder el menos dinero posibles tras un rendimiento decepcionante desde su llegada.

No es la portería la única línea en la que se están apagando todos los rescoldos que quedan del trabajo de Monchi en el Sevilla desde su regreso en 2019. La marcha de Óscar en el centro del campo provoca que toda la línea medular sea obra de Víctor Orta. Con una excepción, la de Joan Jordán, cuya renovación fue una de las últimas operaciones de Monchi en Nervión y al que se le comunicó que era uno de los descartes antes de que acabara la temporada anterior. Sin éxito.

Del trabajo del anterior director deportivo quedan piezas en la defensa y en la delantera. Atrás, se intenta colocar a Montiel, se escuchan ofertas por Acuña y no hay más remedio que contar con Nianzou y su desorbitado sueldo. Arriba, Ocampos es fijo y Suso parece que también. El sello de Orta se empieza a notar y cambiar todo lo que no ha funcionado las últimas dos temporadas parece innegociable.

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