Camavinga cumple su sueño

El día que Camavinga llevaba años soñando, llegó. Deschamps se postró ante las cámaras de TF1, miró al presentador y mientras se emitían las colas, dijo su nombre: “Eduardo Camavinga”. Punto y final. En su casa debió gritar de alivio, soltando toda la tensión acumulada en meses de inquietud. De saber que su rendimiento había bajado con respecto a la temporada pasada y arrastraba la sensación, amarga como pocas, de estar tirando por la borda lo cosechado durante la 2021-22. De pensar que le iba a pasar factura. Pero Deschamps demostró tener memoria... y mucha confianza en él, pues sólo suma 99′ con la absoluta (tres partidos oficiales; ninguno entero). Pero Camavinga ya no es sólo futuro, también presente. Un jugador mundialista.

Las últimas declaraciones de Deschamps sobre Camavinga

Todo sucede en un contexto de bajas: Kanté y Pogba llevan semanas sabiendo que no iban a estar en Qatar. El centrocampista del Chelsea sufrió una aparatosa lesión en el tendón de la corva: tras asumir que no había manera de llegar, aceptó pasar por el quirófano y estará cuatro meses de baja. En cuanto al volante de la Juventus, su situación es más controvertida. Primero y lo más importante, porque arrastra una lesión en el menisco que le tiene en el dique seco desde el 19 de abril, cuando jugó su último partido oficial (hace 204 días). Y segundo, por el empape del ‘Pogba-Gate’, el gran escándalo de los Bleus en los últimos meses: supuestamente, contrató a un brujo para lesionar a Mbappé.

Sin ellos, surgían tres posibles nombres para reforzar el centro del campo: Guendouzi, Camavinga y Veretout. De ellos, a priori, iban a ir dos. Finalmente, los tres; por ende, va convocado el madridista. Deschamps lo hizo debutar con la absoluta el 8 de septiembre de 2020, convirtiéndolo en el jugador más joven en estrenarse con la selección francesa en este siglo (17 años, 9 meses y 29 días) y en el más precoz desde 1945, superando a Maryan Wisniewski, que lo hizo con 18 años y 2 días (era el año 1995). Pero la Federación estimó que necesitaba más rodaje y lo devolvió a la dinámica de la Sub-21, con la que se ha pasado dos años. Hasta ahora. Este Mundial es su salto definitivo a la absoluta. La confirmación de su madurez. Pese a que Deschamps le dio un toque de atención público en la debacle ante Dinamarca y parecía reducir sus opciones de Mundial, al final irá a Qatar... con 20 años recién cumplidos. Hoy sopla las velas, en concreto.

Estaba al teléfono... ¡con Tchouameni!

Anoche habló con RMC para compartir cómo se enteró de la noticia: “Ha sido una gran alegría, siento mucho orgullo. No supe nada las horas previas; nada hasta el anuncio de la lista. Cuando me enteré, estaba con mi familia. Según se acercaba el momento, iba sintiendo un pequeño nudo en el estómago. Y salió. Estaba con Tchouaméni al teléfono y Benzema, luego, me felicitó”.

Al ser preguntado sobre si es un sueño cumplido, dijo: “¡Claro! Es algo que tienes desde niño. Participar en un Mundial es una locura. Si fuera necesario, iría hasta de portero. La prioridad ahora es ganar nuestros partidos; en cuanto a lo personal, quiero devolverle al entrenador la confianza que me ha depositado, demostrarle todo de lo que soy capaz... y por qué me eligió”.

Dos madridistas más

Con él, serán tres los franceses del Madrid que estarán en el Mundial: Tchouameni y Benzema. Se confirma el regreso del delantero a una Copa del Mundo (estuvo en Brasil 2014, donde cayó eliminado ante Alemania; 0-1 en cuartos), pero se perdió Rusia 2018. Tras ganar el Balón de Oro y pese a la “fatiga muscular” que le está impidiendo jugar con el Madrid, estará en Qatar. Como Tchouameni, que sí jugará su primer Mundial (tiene 22 años, que en enero serán 23). La noticia de la noche fue la ausencia de Mendy, algo previsible en cierto modo: Deschamps nunca ha terminado de contar con él (sólo ha participado en dos de los últimos 27 partidos de Francia). Los elegidos han sido Lucas Hernández y Theo Hernández.