SELECCIÓN ESPAÑOLA | ATHENEA
“¿Mi futuro? No pienso en otra cosa que el Real Madrid”
Athenea del Castillo atiende a AS antes de viajar a Bélgica con La Roja para comenzar la fase de clasificación para la Euro 2025. La cántabra habla de sus inicios, del Depor, de Vilda, de Montse...
Athenea del Castillo (Solares, 2000) es de esas jugadoras que tiró la puerta abajo de La Roja cuando militaba en el Deportivo. A sus 23 años es ya una intocable para Montse Tomé. No se cansa de trabajar y ya sueña con ganar su primer título en la historia con el Real Madrid.
De nuevo a la Selección, ¿en qué momento está Athenea?
Bien, estoy muy contenta de poder estar aquí de nuevo. Cada vez es más complicado poder entrar en las listas. Y ahora ya con ganas de estos dos partidos.
¿Alguna vez se le pasa por la cabeza no estar?
No, simplemente me centro en trabajar y en hacer las cosas que sé hacer. Las cosas van llegando. Estoy muy contenta de seguir con la Selección.
Sólo tiene 23 años y ya ha ganado un Mundial y la Nations League. ¿qué tiene Athenea en el horizonte?
Eso ya es pasado, ya hay que pensar en el siguiente reto. Tenemos muchísimas ganas y muchísima ambición. Ya estamos pensando en lo siguiente. Al final es eso, tener cada día un reto, un objetivo nuevo. Tengo 23 años y estoy muy orgullosa de todo lo que he conseguido, pero quiero más.
¿Se celebró la Nations?
Sí, claro. El equipo estaba muy contento, seguimos haciendo historia. Sobre todo, pudimos hacerlo en casa, con nuestra gente. Es un plus más. Y ya pensando en conseguir la clasificación para la Euro. Esto no para.
Hable de sus inicios en el fútbol.
Empecé en el colegio, jugaba en el patio con los otros niños, y alguna compañera. Hablé con mi padre y le dije que quería jugar al fútbol. “Venga, pues te apuntamos al equipo del pueblo”, fue su respuesta. Empecé con niños, si había una niña en otro equipo era: “Uau, una niña”. En infantil de segundo año ya se creó uno femenino, en la escuela de Pedro Munitis. Al principio tuve dudas por cambiarme, yo estaba tan feliz con mis compañeros. Luego cuando viví un vestuario de chicas ya me di cuenta que era la mejor decisión que pude tomar. El primer año jugábamos contra niños, luego ya decidimos ir a jugar la liga vasca que tenía competición femenina. En cadete ya no permiten jugar… Y de ahí al Racing féminas, al Depor, al Real Madrid.
¿Destacaba con los chicos?
Sí, la gente decía que lo hacía muy bien, incluso mis compañeros me lo decían. Lo que es cierto que de pequeña marcaba más goles que ahora. Fui subiendo etapas, porque de alevín era defensa. En infantil fue centrocampista y luego ya encontraron mi posición de extremo. Me gustaba jugar en todos los sitios.
Athenea de central, con esos nervios…
Sí, correteando siempre, fuera de central o de lateral. Yo sólo correteaba para arriba y para abajo. Cuando eres niña tiene que jugar en todos los sitios.
Y militando en el Depor llegó la llamada de la absoluta. Y su debut.
Lo recordaré siempre, un 23 de octubre en La Cartuja, precisamente contra República Checa. Por esa razón esta concentración es un poquito especial. Eso siempre te queda en la memoria. Gracias al Deportivo empecé a jugar al fútbol profesional, es de agradecer el esfuerzo que hicieron para que yo estuviera allí. Fueron dos años maravillosos de mi vida. Gracias a ellos pude fichar por el Real Madrid, debutar con España…
Jorge Vilda fue el que le dio esa oportunidad…
Por supuesto, también fue importante porque fue quién decidió que yo estuviese en esa concentración. Y sacarme al campo. Depositó confianza en mí.
A partir de ahí todo ha ido lanzado en su carrera
Sí, eso pienso muchas veces. Ha pasado todo muy deprisa. Con 18 años debuto en la liga, vivo lo mejor del fútbol con el Depor y luego lo peor. No conseguimos la permanencia después de darlo todo. Me ficha el Real Madrid, el sueño que tengo desde niña. Ese mismo año nos clasificamos para la Champions. Y seguimos evolucionando año tras año, eso es lo importante. A veces se me olvida que tan sólo tengo 23 años y que me queda todo por delante.
¿Qué es el Real Madrid para usted?
Es un orgullo, es el sueño de la niña de siete años que quería vestir la camiseta del Real Madrid.
Hablando del futuro, ¿piensa en otra cosa que no sea el Real Madrid?
No. Para mí lo más importante es cumplir sueños y yo he cumplido el mío jugando aquí. Ahora tengo otro: tengo la ambición de ganar el primer título en la historia del Real Madrid. Estar ahí y poder hacerlo.
En el día a día, ¿sigue el fútbol? ¿El femenino y masculino?
Sí, me gusta ver todos los deportes, pero el fútbol lo sigo especialmente. Todos, estoy súper pendiente. En el femenino tengo amigas, a Iris en la Real, a Méndez en el Levante, a Sheila en el Atleti. Me gusta saber de las jugadoras a las que me voy a enfrentar. Analizo el rival desde casa. El masculino también lo sigo y cada vez que puedo voy al estadio, es un sueño poder ir al Bernabéu fin de semana tras fin de semana.
El apoyo de la afición es diario y ya la reconocen por la calle. ¿Cómo lo lleva?
Tengo mucho que agradecer, siempre me muestran un cariño especial. Siempre a la salida del Di Stefano soy de las más reclamadas. Niños, niñas, madres… es una responsabilidad porque se fijan en nosotras. Siempre intento dar cariño, quedarme a firmar hasta el final, porque yo también era esa niña, y entiendo lo que es.
Hubo mucha controversia cuando no firmó el comunicado de renuncia tras el caso Rubiales (de renuncia a la Selección). ¿Cómo lleva las redes sociales y la crítica? ¿Sufrió?
No. No soy de leer las redes sociales. Las tengo, sí... pero al final tengo mis principios y hago lo que yo siento. Y mi familia y mis seres queridos me apoyan. No necesito más. Entro en redes y he aprendido a gestionarlo. Lo que me suma, lo leo; lo que no, evito leerlo.
¿Ha necesitado ayuda psicológica en algún momento?
No, por necesitarlo no. Pero trabajo con una psicóloga desde hace años y gracias a ella vivo más tranquila. He aprendido a gestionar muchas cosas que antes no sabía. Es lo mejor: gestionar tus emociones, sentimientos. Por ejemplo, llevar con naturalidad que somos muchas y que tienen que jugar todas. Son picos de forma que hay que saber llevar.
¿Qué le aporta Montse desde que llegó en esta nueva era post-Mundial?
Ya la tuve en Sub-20 o Sub-23 y es una entrenadora que me gusta por la forma en la que transmite las cosas. Le gusta jugar con extremos abiertos que al final es en lo que destaco. Me pide que sea yo, que haga mucho uno contra uno, que sea vertical. A mí me aporta confianza.
Para terminar, destaque un momento del Mundial...
Son tantos… pero si pienso en el Mundial se me viene Olga a la cabeza, ese gol. Otro que me gusta mucho es cuando ganamos, que me acerqué a la grada y le enseñé la medalla a mi padre. Tenemos una foto muy bonita de ese momento.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.