“Me veo jugando la Champions con la Real el próximo año”

Vuelve la LaLiga y en AS lo celebramos hablando con uno de los jugadores más destacados de la primera parte de la temporada. Los nueve goles que ha marcado ya Brais Méndez en su estreno con la Real Sociedad le convierten en el fichaje más rentable del pasado verano. A punto de cerrar un 2022 inolvidable para él, hablamos con ‘Braisinho’, que mira con ambición al próximo año.

¡Vuelve LaLiga! ¿Ganas?

Sí, muchas. Hemos aprovechado para estar con la familia este tiempo y para hacer algún viaje. Nos ha venido bien este parón porque teníamos mucha carga de partidos y había que parar para liberar la cabeza y coger energía. Pero ya estamos centrados en Osasuna sabiendo que será un partido muy complicado.

Muchos jugadores han estado en Nueva York en el tiempo del parón. ¿Les hacían precio o qué?

(Risas). Pues la verdad es que no lo habíamos hablado, y cuando lo empezamos a comentar en el vestuario, nos quedamos sorprendidos. Y claro, ya aprovechamos para cenar un día todos juntos y vernos también allí.

Dicen que no hay mal que por bien no venga. Usted pudo descansar durante el Mundial, pero no es lo que quería, ¿no?

Eso es cierto. Al final, han sido muchos partidos seguidos y era necesaria esa pausa para descansar, cargar pilas y tomar aire. Claro que hubiera sido un placer ir al Mundial, pero no ha sido posible, así que sólo me queda seguir trabajando igual de duro para que en el futuro esas oportunidades se puedan dar.

¿Le molestó no estar en la lista de Luis Enrique ?

No, qué va. Para nada. Al final el seleccionador tenía que escoger a los 26 jugadores que mejor podían interpretar su idea, y hay que respetarlo. Yo me quedé con la conciencia muy tranquila, sabiendo que había dado todo lo que tenía para poder estar ahí. Y punto. Luego ya solo me centre en disfrutar de la familia en ese tiempo de parón.

Pero es que hizo méritos más que suficientes para jugar el mundial. Suena raro que no fuera con la Selección el centrocampista más goleador en ese momento…

Bueno, no lo sé. Ya te digo que tengo la conciencia tranquila. Pero realmente Javi muchos jugadores que también habían hecho esos méritos y podían estar. Al final es la tarea del seleccionador elegir, y hay muchos otros jugadores muy buenos que también nos hemos quedado fuera y que otra gente nos hubiera llevado. Pero si cada uno pudiera elegir, llevaría una lista totalmente diferente de otra.

Todo esto de sus méritos para jugar el Mundial no es más que otro síntoma de que su espectacularmente rápida adaptación a la Real…

Pues sí. Desde el primer momento las cosas han salido de maravilla en todos los aspectos. Estoy muy agradecido por cómo me han recibido tanto en el club como en la ciudad.

¿Le ha sorprendido algo de su estancia en San Sebastián?

Bueno, no se qué expectativas tenía, pero lo cierto es que estoy muy a gusto y feliz. Es una ciudad tranquila, sin grandes agobios, que puedes salir a pasear al monte o a la playa. Y la gente es muy agradable, porque te deja tu espacio. Te permite estar conectado con la naturaleza, disfrutar de tu gente y hasta jugar a golf, que me gusta mucho; aunque ahora con tanto partido no me da tiempo de practicarlo.

¿Tiene algo que ver en esa rápida adaptación que Donostia sea muy parecido a Vigo?

Puede ser. Porque desde que llegué, supe que me iba a adaptar muy bien. Me recordó mucho a Vigo, es una ciudad pequeña con mar y montaña. Vi muchas similitudes entre las dos y eso ha hecho que sea súper sencillo adaptarme.

¿Le gusta que se destaque todo el rato a Brais Méndez o prefiere estar en un segundo plano?

Al final siempre es bonito que hablen bien de ti, porque quiere decir que algo buenísimo estás haciendo. Pero la verdad es que prefiero pasar desapercibido. Porque si no estás bien, se va hablar mal de ti. Así que prefiero no leer y seguir haciendo el mismo trabajo, se diga lo que se diga. Y así voy a seguir siempre.

¿Y le agrada que le llamen ‘Braisinho’ (el apodo se lo puso nuestro compañero de Radio Vigo, Jacobo Buceta)?

(Risas). Sí, sí. Mientras sea con cariño, no tengo ningún problema con cómo se me llame, ni con ningún mote.

¿Y no le ha sorprendido la cantidad de goles que ha marcado hasta ahora en la Real?

Obviamente, son números que llaman la atención para ser un centrocampista, porque nueve goles son mucho goles. Pero soy un jugador que me gusta llegar al área desde la segunda línea, y por suerte este año hasta ahora estoy teniendo más acierto que otros años. Pero cuando estás en un equipo que ataca tanto, la probabilidad de que el balón llegue al área es mayor, y eso tienes que intentar aprovecharlo. A mi me gusta mucho pisar área y ayudar al equipo aportando números, bien sea con goles o con asistencias.

¿Ha detectado las claves de porqué le está yendo tan bien en la Real?

Es un cúmulo de cosas. Me considero una persona madura, porque salir con 13 años de mi casa me ayudo a madurar. Y salir de esa zona de confort, salir de esa presión añadida de lo que representa ser un canterano y estar en un club que llevamos sufriendo varios años, y llegar a un club que apuesta por un fútbol que me va a la perfección, con unos compañeros con los que es muy fácil jugar.

¿Le va en la Real mejor de lo que esperaba?

Sí, creo que sí. Las expectativas se han superado. Yo venia con la idea de poder ayudar en lo que hiciera, pero quizá no esperaba este inicio tan bonito e ilusionante.

La Real la heredarán los zurdos, ¿no?

(Se ríe). Es una barbaridad. Nunca había jugador en un equipo con tanto zurdo. Pero es final la calidad de esos compañeros, porque cuando estás en el campo y te ves rodeado de tanto jugador de buen pie, es todo más sencillo.

Hablando de zurdo, ¿tiene ya ganas de poder jugar con Oyarzabal?

Claro que sí. Es un jugador muy importantes que a pesar de haber estado lesionado de larga duración, aporta mucho al vestuario por ser un líder y estar siempre pendiente de todo el mundo. Pero va a aportar mucho más dentro del campo, y estamos deseando que pueda empezar a participar.

¿Cómo le está viendo? Porque está ya a punto de volver a jugar y anda todo el mundo como ansioso de verle de nuevo…

Yo le veo muy bien. Tranquilo. Siguiendo los pasos que debe seguir, sabe que no debe precipitarse, ni volverse loco, porque eso le puede pasar factura. Pero está con unas ganas tremendas de saltar al campo ya a jugar un partido.

Retoman la Liga como terceros en Liga, ¿hay que creerse que se puede pelear por la Champions League?

A ver, yo creo que hay que ser ambiciosos. No fliparnos tampoco. Pero sí creérnoslo. Porque tenemos plantilla para soñar y con capacidad para pelear por esa tercera o cuarta plaza.

¿Hablan en el vestuario de la Champions?

La verdad es que no hablamos mucho de objetivos, pero al final cada uno es consciente de cómo se están haciendo las cosas y de que éste es el camino a seguir. Ahora estamos terceros y depende de nosotros el seguir ahí arriba.

Se ve jugando la Champions con la Real la próxima temporada?

Sí (Rotundo). ¿Por qué no? Estamos haciendo las cosas muy bien y creo que podemos llegar a conseguirlo si mantenemos esta línea. Todos en el vestuario tenemos ese deseo.

Y luego en Europa están ya en octavos de final de la Europa League, todo un logro para la Real. ¿En qué orden de prioridad está la competición europea?

En Europa mucha gente cuando salió el sorteo pensaba que tendríamos que pelear por la segunda plaza, pero hemos demostrado que podemos pelear contra cualquiera, ganando además en un campo como Old Trafford. Vamos a intentar llegar lo más lejos posible. Creemos en nosotros y eso es lo más importante para hacer algo grande.

Aquel partido en casa del Manchester United no lo va a olvidar nunca, ¿verdad?

Jamás. Fue algo increíble, porque era mi debut en Europa. Una noche histórica que voy a guardar para siempre, porque no todos los días ganas en un escenario tan imponente y grande.

Y todo esto hay que compaginarlo con la Copa del Rey, que no será fácil…

Esperemos que no lo sea. Será buena señal. Tenemos mucho respeto por todos los equipos, pero también tenemos mucha ilusión puesta en la Copa. Hace unos años se ganó, y por qué no repetir eso. Sabemos que es muy complicado ganar un título, pero queremos intentarlo hasta el final y hacer todo lo posible.

Una de deseos… ¿Qué le pide al nuevo año?

(Piensa unos segundos). Salud sobre todo. Y que las cosas sigan como hasta ahora, trabajando como lo estamos haciendo, podemos marcarnos grandes objetivos.

Y si le doy a elegir… ¿Champions, final europea o Copa?

Soy de Los que no pone barreras a las ilusiones. Pero tampoco le doy muchas vueltas a elegir una u otra cosa. Vivo el momento y disfruto del día a día. Ya se ira viendo de lo que somos capaces.

Termina un 2022 que no va a olvidar fácilmente, ¿verdad?

Imposible olvidarlo. Es un año especial y bonito. Diferente porque tuve que tomar la decisión de salir de casa. Lo voy a guardar siempre en el recuerdo.

¿Qué culpa tiene Imanol en su más que evidente paso adelante en la Real?

Una gran parte. Al final por la manera que ve el fútbol y cómo nos aprieta en Zubieta, hace mejorar al grupo y al individuo, saca la mejor versión de cada uno y eso hace mejor al grupo.

¿Le habían dicho alguna vez que sobre el campo se parece mucho a su compañero Mikel Merino?

(Risas). Alguien me lo comento hace relativamente poco, sí. Es un placer jugar con él, nos entendemos muy bien, nos buscamos, es un grandísimo jugador.

Y jugar al lado de David Silva, con el que se encuentra muchas veces en el campo, tiene que ser…

¡Muy sencillo! (Sonríe). Esa es la palabra. Siempre está bien colocado. Es el primero que aprieta y va a morder, es un ejemplo para nosotros. Disfrutar y aprender de él en los entrenamientos es una maravilla. Hay que fijarse siempre en todo lo que hace sobre el campo.

¿Qué le gustaría que le dijera un aficionado de la Real al terminar la temporada?

Lo que me gustaría es saber si siente orgullo del equipo cuando se ha ganado, pero sobre todo cuando se ha perdido.