Deportivo - Pontevedra, cuando el derbi se jugó mirando al abismo
Ambos equipos se reencuentran en Riazor año y medio después de que el Depor se impusiera en un duelo a todo o nada con la amenaza real de caer a la quinta categoría del fútbol español.
Siempre se dice, y con razón, que el fútbol no tiene memoria. Pero de vez en cuando conviene hacer un esfuerzo para recordar. Por encima de todo, para evitar cometer los mismos errores del pasado. Y a recordar es a lo que debe ayudar el Deportivo - Pontevedra que se celebra este domingo en Riazor (19:00 horas). Un derbi que regresa año y medio después de que el último encuentro entre dos históricos se disputase mirando al abismo de la quinta categoría del fútbol español.
Es posible que en A Coruña ese pavor haya quedado difuminado. En parte por cómo terminó aquella primera fase (tres victorias consecutivas), en parte por el curso pasado en el que se fueron apilando otro gran número de emociones. Pero la sensación de tensión que se vivió durante dos semanas en el entorno deportivista fue de las que deberían quedar marcadas a fuego.
Tras caer en A Malata, y con un parón liguero por medio, el Depor llegaba al partido con sólo dos puntos de ventaja sobre el Pontevedra, cuya temporada, también decepcionante, lo hacía navegar por las peligrosas aguas del doble descenso. El escenario hacía inevitable pensar que el que saliera derrotado quedaría muy tocado no sólo en la clasificación, sino en cuanto a las fuerzas para seguir luchando contra un destino fatal.
Keko y Lucho lanzaron al Depor y hundieron al Pontevedra
El partido respondió a la responsabilidad por parte de ambos bandos y acabó decidiéndose por detalles. Keko fue el autor del único tanto, un golazo a los cinco minutos de partido. Mientras que el portero Lucho García se erigió como salvador en los minutos finales al sacarle un remate a Adrián Cruz que habría supuesto el empate.
El triunfo liberó al Depor, que acabó lanzado y estuvo a punto incluso de meterse en la lucha por el ascenso a Segunda. Tuvo que conformarse con la permanencia en Primera Federación. Pero, como era de esperar en el caso del perdedor, el Pontevedra siguió con su caída libre. Le tocó pelear por no bajar a Tercera Federación, algo que no logró hasta la última jornada derrotando al Oviedo B en Pasarón.
Este domingo ambos clubs vuelven a encontrarse sobre el verde de Riazor con tres importantes puntos en juego, pero con una atmósfera que ni se acerca a la trascendencia de aquella tarde de marzo de 2021.