BARCELONA

Malas vibraciones con Frenkie

Cuatro meses después de sufrir un esguince en el tobillo derecho, el regreso del holandés sigue siendo toda una incógnita. Flick no cuenta con él para los próximos partidos.

GORKA LEIZADiarioAS

Frenkie de Jong empieza a ser más un problema que una solución en el Barcelona. Desde que se lesionara en el Clásico del 21 de abril, el centrocampista holandés no ha dado pie con bola. Intentó sin éxito jugar la Eurocopa con su selección, regresó de las vacaciones claramente fuera de forma y con el tobillo derecho inflamado y continúa haciendo oídos sordos a cualquier tentativa del club para regular su situación contractual: no hay que olvidar que es el jugador con la ficha más alta de la plantilla.

Según ha podido saber AS, ahora mismo nadie en el club es capaz de pronosticar cuándo De Jong estará disponible. El hermetismo sobre su lesión ha llegado a suscitar todo tipo de comentarios, sobre todo desde que Ronald Koeman denunciara una sobreexposición del jugador por parte del Barcelona, cuando aún no estaba del todo recuperado.

La realidad es que Frenkie está a punto de cumplir los cuatro meses de baja por un esguince de grado dos del tobillo derecho, doblando de esta forma el pronóstico inicial, que habían fijado los médicos del club entre seis a ocho semanas. Es cierto que en su caso había el hándicap añadido que era su tercera lesión consecutiva en el mismo tobillo, pero todos habían sido por contacto, por lo que en un principio no había un problema de cronificación.

Desde el club reconocen internamente su desconcierto con la actitud del holandés, que parece ir a otro ritmo diferente que al resto de compañeros. Y como claro ejemplo señalan a Pedri, que se ha recuperado en un tiempo récord de un esguince de grado dos en su rodilla izquierda, que sufrió a mediados de julio en la Eurocopa, regresando este miércoles a los entrenamientos con el objetivo de entrar en la lista para el estreno de LaLiga ante el Valencia en Mestalla.

Pero si su lesión está siendo un auténtico quebradero de cabeza -Flick ya sabe que no podrá contar con el jugador hasta después del parón de selecciones en septiembre en el mejor de los casos-, qué decir de su situación contractual. Con la ficha más alta de la plantilla -en torno a los 35 millones de euros brutos al tener que cubrir los aplazamientos por la pandemia-, Deco ha intentado contactar con su agente para buscar una adecuación salarial, que permita liberal masa salarial, ofreciéndole una renovación a la baja.

Sin embargo, todos los contactos han acabado en saco roto, alimentando la suspicacias del club sobre el holandés, al creer está intentando acabar su contrato -finaliza el 30 de junio del 2026- para poner fin a su aventura blaugrana, saliendo como agente libre.

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