Málaga presenta su magno proyecto de nueva Rosaleda

Ayuntamiento, Diputación y Junta de Andalucía, las tres instituciones propietarias de La Rosaleda, han presentado este viernes el proyecto de nuevo estadio con vista a la candidatura de España (junto con Portugal y Marruecos) para organizar el Mundial de 2030 con un aforo para 45.000 espectadores.

Se trata de un cambio considerable partiendo de la actual estructura del recinto deportivo. No se trata solo de ampliar la capacidad del campo de fútbol (actualmente el aforo es 30.334). El objetivo también es revitalizar y modernizar la zona en consonancia a la importancia del evento y como apuesta de futuro para la ciudad.

Los dos partidos que ha disputado la Selección contra República Checa y Noruega en menos de un año más los tres partidos donde la escuadra escandinava ejerció como anfitriona en tiempos de pandemia han demostrado que Málaga tiene capacidad para organizar eventos deportivos de magnitud. Contra checos y noruegos La Rosaleda se llenó y además hubo presencia de 3.500 aficionados nórdicos. Por ahí no debe haber problemas.

Presupuesto

A grandes rasgos, el plan incluye la creación de 3.000 plazas de aparcamiento y la construcción de un hotel anexo a la zona de Gol Sur. Esto supondría además la desaparición del campo Anexo, el segundo recinto de esta instalación habitualmente usado por el Málaga para sus entrenamientos. Todo ello integrado para un presupuesto que oscilará entre los 70 y los 110 millones de euros con un plazo de ejecución calculado entre dos y tres años.

Las instituciones son conscientes de que, para poder acoger partidos del magno acontecimiento hacen falta muchos cambios. Estadio nuevo por dentro y por fuera, mejorar los accesos, aparcamientos…una obra en toda regla que no es sencilla por la ubicación del recinto limitada por cauce del rio Guadalmedina que no permite mucho margen de maniobra.

El acto, celebrado en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento, contó con la presencia del alcalde, Francisco De la Torre, el presidente de la Diputación Francis Salado y el consejero consultivo del Málaga Francisco Martín Aguilar. Es el punto de partido de un plan que deberá ir progresando poco a poco. El aforo de 40.000 personas es una exigencia de la FIFA. Pero se pretende llegar hasta 45.000 para garantizar que el estadio sea de primer nivel.

Málaga fue sede mundialista en 1982 y, junto con Sevilla, acogió los partidos de Brasil, Escocia, Unión Soviética y Nueva Zelanda. Para ello La Rosaleda asumió una remodelación que con el paso del tiempo ha quedado obsoleta junto a otra que se realizó posteriormente.

De las 15 ciudades que aspiran a ser anfitrionas se escogerá a 11. Málaga espera ser una de las afortunadas. ¿Qué pasaría si no fuera escogida? El alcalde de la ciudad tiene claro que el proyecto seguirá adelante “con o sin Mundial”.