L‘Équipe liquida a Donnarumma

El rendimiento de Gianluigi Donnarumma en la Champions League sigue concitando grandes dudas, una versión radicalmente distinta a la que muestra en el día a día en la Ligue 1. El PSG perdió 2-0 contra el Arsenal y, en los dos goles, sobre todo en el primero, el italiano salió mal parado. A pesar de ello, el cancerbero sigue manteniendo intacta la confianza de Luis Enrique, que no quiso responsabilizarle tras el encuentro en rueda de prensa.

En el 1-0 de los Gunners, no toda la culpa fue de Donnarumma, ya que su central, Pacho, omitió el centro lateral y dejó vendido a su compañero, pero la salida del italiano fue tardía, lo que permitió a Havertz marcar de cabeza a placer. Los centros laterales, su gran debe, volvieron a exponerle, a pesar de que después, en el segundo tiempo, enmendó su error con varias intervenciones de mérito.

¿Tuvo Donnarumma la culpa del 2-0 del Arsenal? Seguramente no, pero lo que es cierto es que el portero se quedó anclado en la línea de gol, lo que permitió que el balón pasara a escasos centímetros de sus guantes y no pudiera repeler el centro lateral. Barcola no despejó en primera instancia y, después, cuando el portero del PSG quiso evitar el 2-0 de los de Arteta, la pelota ya estaba en la red. En Francia, empero, sí consideraron que pudo hacer mucho más y definieron como fatídica su lectura de la jugada.

El diario L’Équipe, encargado de dar las notas de los partidos, valoró la actuación del exjugador del Milan con un insuficiente ‘3′. “¿De verdad puede tener París ambiciones tan altas con un portero que comete tantos errores en la Champions League? Culpable de no entrar en su área pequeña en el primer gol (20′), el italiano tuvo menos culpa en el segundo, pero estuvo igual de pasivo. Dos veces el balón acabó en sus guantes tras dos disparos de Martinelli”, resaltan.

El diario Le Parisien, el más afín al PSG, también criticó la prestación de Donnarumma, aduciendo que el portero sigue sin demostrar que es uno de los mejores porteros de la Champions y que, además, existen precedentes en la máxima instancia europea de actuaciones similares. Le achacan los dos goles, aunque le eximen de toda culpabilidad en el segundo, añadiendo que podría haber hecho mucho más.

El año pasado, en la Champions, Donnarumma ya suscitó muchas dudas por su rendimiento en algunos encuentros. En la fase de grupos, ante el Newcastle, en un partido que salvó milagrosamente el PSG en el minuto 96 por un penalti litigioso, permitió que Isak rematara solo tras un blocar un disparo cuyo rechace quedó muerto en el punto de penalti. En la doble confrontación ante el Barcelona, en cuartos, que los parisinos solventaron tras la roja de Araujo, fue señalado en varios goles que anotaron los de Xavi.

A pesar de sus dos ‘errores’ ante el Arsenal, Luis Enrique no contempla sentar a Donnarumma, incluso habiendo desembolsado 20 millones en verano en Sáfonov. El ruso suplió a su compañero en los tres últimos partidos, Girona, Reims y Rennes, dejando buenas sensaciones, insuficientes, de momento, para abrir un debate en la portería en París. El napolitano deberá mejorar su rendimiento si quiere acercar al PSG hacia su ansiada Champions.

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