La polivalencia de Mantilla, la irrupción de Mario y el ahorro en laterales

Los últimos partidos de la pasada temporada no solo sirvieron para culminar la remontada que protagonizó el Racing de la mano de José Alberto, que tomó la equipo en la 19ª posición, en descenso, y lo dejó 12º, sino que también le sirvió para darse cuenta que puede contar, con total garantía competitiva, con Álvaro Mantilla y con Mario García, algo que no tuvo claro durante gran parte de la temporada. El técnico ovetense llegó a Santander sin apenas conocimiento de las características de ambos (salvo los partidos de lateral derecho que vio a principio de temporada a Mantilla) y pese a las buenas sensaciones que le trasmitían en los entrenamientos, no tuvo claro que podrían ser parte del proyecto de la próxima campaña hasta verles competir en las últimas jornadas. Eso va a permitir al Racing ahorrar en los costados.

A pesar de que han dejado al club dos laterales, Unai Medina y Eneko Satrústegui, el Racing no va a fichar dos sustitutos. Llegará uno o ninguno. El Racing va a necesitar rebajar notablemente su límite salarial (todavía por cerrar, pero que va a estar muy por debajo del de la pasada campaña al no contabilizarse ya el ingreso por el traspaso de Pablo Torre), por lo que tendrá que recortar efectivos y dejar la plantilla en 22 o, incluso, 21 futbolistas. Ahora mismo, buscar un lateral no es una prioridad, pero si el discurrir de los acontecimientos en la negociación con LaLiga, con más ingresos que permitan elevar el techo de gasto en plantilla, abren la puerta a reforzar la posición, el perfil que cuadraría sería el de un jugador de características más defensivas que Dani Fernández, Saúl y Mario García y que sea capaz de jugar por ambos costados. Y barato. La cuadratura del círculo.

Durante sus primeros meses en Santander, José Alberto consideró a Mantilla como un lateral derecho que puede jugar de central. Hoy, tras sus recitales junto a Pol Moreno cuando les tocó jugar por las lesiones de Germán y Rubén Alves, sabe que es un buen central, además de un buen lateral, de perfil complementario al de Dani Fernández, y cuenta con el camargués para ambas posiciones, dos por uno. Con Mantilla, junto a Pol, Germán y Rubén Alves tiene cubierto el eje de la zaga (pendientes de saber qué decisión se tomará con Juan Gutiérrez y Diego Mirapeix, que tienen contrato con el primer equipo), y con el de Maliaño y Dani se arregla en el lateral derecho.

Menos complementarios son los perfiles de Saúl García y Mario García. Ambos son más fiables atacando que defendiendo y tienen en el despliegue físico y el centro más aptitudes que en la cobertura táctica en defensa. Es verdad que a José Alberto le gusta ese perfil de lateral, la prueba es que tenía disponible a Satrústegui, siempre fiable defensivamente, y no le utilizó, pero no dejar de ser una variable a tener en cuenta, sobre todo si se pone en la balanza que el favorito ahora mismo para jugar por delante en esa banda es Íñigo Vicente, que no es precisamente el mejor defensor de la plantilla y que prefiere presionar hacia arriba que correr hacia atrás, lo que, cuando no roba al primer intento, suele dejar a su lateral en inferioridad numérica en ese costado. El despliegue defensivo de Aitz Aldasoro y de Íñigo, basculando desde el pivote, ayudó a taponar muchas veces esa vía de agua. El plan es que Mario sea jugador a todos los efectos de la primera plantilla, pero manteniendo ficha del equipo filial.