La polémica del derbi femenino del Guadalquivir sigue viva
Nuria Barrios, remera sevillista, denuncia por redes sociales agresiones por parte del bote bético y la pasividad del árbitro, al que señala como hincha verdiblanco.
La polémica de los derbis sevillanos se ha trasladado en esta ocasión al río Guadalquivir. El Sevilla se impuso al Betis después de 14 años en categoría masculina, pero en la femenina continuó el dominio verdiblanco y ahí fue donde se registró un incidente que aún hoy trae cola.
Nuria Barrios, remera del bote sevillista, ha aprovechado las redes sociales para señalar lo ocurrido. Y la gravedad es evidente. Barrios afirma que el árbitro de la competición avisó que en caso de choque de palas, la regata se detendría. “Íbamos fácil, ellas ya no podían, y lo único que hicieron fue chocarnos. Una compañera cayó al agua tras el impacto. Se ha hecho daño, se ha clavado el remo, y el árbitro se estaba riendo. Ellas han hecho su función, pero quienes mandan han incumplido la normativa", afirma.
Según la versión arbitral, se entendió que el bote sevillista, que partía por la calle de Sevilla con la ventaja de ceñirse en Chapina, no atendió a su llamada de virar a babor para evitar el choque. El juez dictaminó desde el bote de arbitraje que iba justo detrás y validó el triunfo pese a las reclamaciones sevillistas.
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