LAS PALMAS

La pelea de Sandro continúa

Las lesiones le impiden tener continuidad con Las Palmas. Ayer se lesionó en el calentamiento. Contra el Huesca tiene, además, la cláusula del miedo.

G. Suárez
Las Palmas
Carlos Diaz-Recio

Apenas unos minutos antes de empezar el duelo que ayer enfrentó a Las Palmas con el Mirandés saltaba la sorpresa. Ocurrió que Sandro Ramírez, que figuraba en el equipo titular tras su gran partido en Ibiza, donde hizo el 1-1, un golazo, de un partido que la UD acabó ganando 1-2, finalmente se caía del equipo.

De pronto, el delantero grancanario de 27 años, que regresó este verano a la disciplina de Las Palmas tras abandonar el club en edad cadete rumbo al Barcelona, enfilaba el banquillo. Calzado con playeras, no con las botas de juego, y la cara más que larga. “Notó unas pequeñas molestias de un golpe ante el Ibiza y no se ha sentido cómodo en el calentamiento”, especificó tras el partido su entrenador, García Pimienta. No hubo intención de correr ningún riesgo.

Sea como fuere, su disponibilidad en el encuentro del próximo sábado contra el Huesca es una incógnita por dos razones. Resulta que está cedido por el propio club oscense, que incluyó la “cláusula del miedo” en su contrato de cesión, por lo que Las Palmas tendría que pasar por caja si quiere contar con él. No parece lógico, pues cuenta con Marc Cardona y Andone en buenas condiciones. En segundo lugar, su disponibilidad genera dudas igualmente. “Tiene experiencia y sabe controlar su cuerpo y sabía que no estaba en buenas condiciones. Creo que no va a ser nada importante, pero hasta las pruebas de mañana (por hoy) no podemos decir nada”, dijo Pimienta. De momento no existe parte médico oficial del club, por lo que tampoco hay tiempo estimado de reaparición.

En cualquier caso, Sandro continúa peleando contra esos problemas físicos que le impiden tener continuidad. Tras no hacer apenas pretemporada con el Huesca, no pudo debutar hasta la séptima jornada. Cayó abatido en la 15ª tras el 1-1 contra el Eibar, el 6 de noviembre, y no se le vio sobre el césped hasta el 8 de enero, contra el Racing. En el colmo de la desgracia física, durante el envite copero en Teruel (13 de noviembre) saltó al césped tras el descanso pero, de nuevo lesionado, tuvo que marcharse cabizbajo apenas 25 después.

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