CASO NEGREIRA

La mitad de los ex del Madrid señalados por Laporta ejerció cuando no existía la Liga

De 1917 hasta el inicio del torneo en 1929, el Barça ganó 5 Copas por una de los blancos. Desde 1939 hasta la llegada de Di Stéfano (1953), 2 Copas madridistas por 5 Ligas y 4 Copas azulgrana.

La mitad de los expresidentes arbitrales acusados por Joan Laporta de haber pertenecido antes al Real Madrid ejerció sus funciones cuando aún no existía el Campeonato Nacional de Liga. Desde 1917, cinco fueron los ‘ex’ del Madrid, uno en dos mandatos, que rigieron el arbitraje hasta que el 10 de febrero de 1929 se disputó el primer partido de Liga. Una época, además, en la que el Barcelona se llevó cinco Copas por sólo una del Madrid, teniendo en cuenta que la Copa era el único torneo en el que se enfrentaban entre sí equipos de toda España, ya que el resto de las competiciones eran campeonatos regionales.

La nómina de rectores denunciada por Laporta cuenta con diez dirigentes que habían tenido con anterioridad algún tipo de relación con el Real Madrid (jugador, directivo o simplemente socio). Son Alfonso Albéniz (dos mandatos), Carlos Dieste, Luis Colina, Antonio de Cárcer (dos mandatos), Julián Ruete, Eulogio Aranguren (dos mandatos), Emilio Suárez, Luis Saura, Arturo López y José Plaza (dos mandatos). Los cinco primeros ejercieron cuando aún no existía la Liga. El resto fueron cinco de los 16 presidentes que los árbitros tuvieron en España en 42 años.

Así, en los periodos en los que mandaron los dirigentes denunciados por Laporta, el saldo es de 14 Ligas y 10 Copas para el Real Madrid y de 6 Ligas y 14 Copas para el Barcelona. Incluso, el equipo azulgrana fue el que alzó la primera Liga de la historia en 1929 con Alfonso Albéniz, uno de los señalados por Laporta, como máximo dirigente arbitral.

En lo que se refiere al periodo puro y duro de la dictadura de Franco (1939-1975) el Real Madrid alzó 20 títulos nacionales (14 Ligas y 6 Copas) por 17 del Barcelona (8 Ligas y 9 Copas). De hecho, desde que se instauró la dictadura en España al término de la Guerra Civil, el Real Madrid apenas olió dos Copas durante 14 años, mientras el Barça alzaba 5 Ligas y 4 Copas. El punto de inflexión llegó en 1953 con el fichaje de Alfredo Di Stéfano y ya sin ninguno de los señalados por Laporta al frente del estamento arbitral.

Amén del dominio nacional y europeo del Real Madrid de los Di Stéfano, Puskas y Gento, la eclosión de títulos del Real Madrid a nivel doméstico se vivió durante el segundo mandato arbitral de José Plaza (1972-1990) con 10 Ligas y 5 Copas. Es precisamente este gobierno de los árbitros el más señalado por los azulgrana (“Mientras Plaza sea presidente...”) y el que persiste en su imaginario como una de las etapas más claras del favoritismo hacia el club de Concha Espina. Los máximos éxitos del Barcelona llegaron, por su parte, durante la presidencia de Victoriano Sánchez Arminio (1993-2018) con 12 Ligas y 8 Copas. Este lapso coindice con el tiempo que Enríquez Negreira ejerció como vicepresidente del CTA.

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