“Vivir con mis padres me ayuda, juego en el City pero tengo una vida normal”

Rico Lewis tiene 18 años y ya suma más partidos en su haber en el primer equipo del City que las velas que lucirán en su próxima tarta de cumpleaños el próximo 21 de este mes. Su palmarés también es impropio para su edad con una Liga de Campeones, una Supercopa de Europa, una Premier League y una FA Cup. Algunos necesitan una carrera, él lo tiene antes de siquiera cumplir veinte. La gran promesa de la academia del Manchester City posiblemente tras Phil Foden, enormemente potenciada tras la llegada de la nueva propiedad, concedió una entrevista a Daily Mail en la que mostró su lado más personal en una familia que no deja indiferente.

Aunque ha triunfado de sobra en el mundo del fútbol, Rico Lewis comenzó practicando muay thai, boxeo tailandés, en el gimnasio propiedad de su padre, que aún regenta el mismo gimnasio de deportes de contacto. Un físico que este domingo podrá demostrar frente al Chelsea en Stamford Bridge desde las 17:30 h.

“Al principio, el muay thai nunca fue una pasión, pero se convirtió en algo que realmente disfruté. La gente puede morir luchando. Te enseñan a entrenar como si fueras a pelear, lo cual es similar al fútbol”, reconocía en una extensa entrevista. Lewis explicó que este tipo de entrenamiento le ayudó con la disciplina, pero también con su físico y que aún lo sigue practicando. “Siempre tienes que estar alerta, en constante movimiento, moviendo las caderas. Ha ayudado enormemente con el equilibrio, especialmente jugar ese papel de mediocampo con los giros y el mantenimiento del equilibrio”, explicaba.

Este verano, Rico se preparó de nuevo en el gimnasio de su padre buscando complementar un potente físico que le permite jugar en distintas posiciones, aunque habitualmente lo haga en el lateral. “En la pretemporada de este año estuve con mi padre en el gimnasio. Es un tipo de entrenamiento completamente diferente, realmente bueno para la potencia”, continúa.

Entre el boxeo y un abuelo bajista de Oasis

Para Rico Lewis la familia es clave en el desarrollo de su carrera. El gimnasio de su padre le ayuda a prepararse, pero también considera que su casa hace que mantenga los pies en el suelo. Tanto, que aún vive con sus padres. Ahí guarda con mimo las medallas del triplete en su habitación, aunque reconoce que nunca llegó a dormir con ellas. “Nunca he dormido con las medallas del triplete. Vivir en casa de mis padres es reconfortante. Hago lo que hago, vuelvo a casa y sigo llevando una vida normal, como antes”, sentenció.

Dentro de su familia, no es el único que se codea día a día con estrellas. Rico reconoció en Daily Mail que su abuelo llegó a ser el bajista de Oasis y que le influenció hasta llegar a aprender algo de música. “Mi abuelo era bajista y se fue de gira con Oasis. Probablemente podría contarte todas sus historias, pero no las recuerdo. Esa fue una de las razones por las que comencé (a tocar la guitarra). También es un gran seguidor del City y está encantado cuando juego”, explicó.

“Creo que tengo TOC”

Lewis también reconoce en esta entrevista que vive su profesión de manera obsesiva y que siempre trata de tener todo controlado para su tranquilidad. El lateral se muestra como un jugador muy atento y que siempre trata de aprender de la estrella que tiene en el banquillo, Pep Guardiola. Además, reconoce, asume sus conocimientos de forma natural.

“Se podrían estudiar las tácticas de Guardiola, pero yo no lo hecho. Creo que mi cerebro funciona así. Antes del primer equipo intentaba estar dos o tres pasos por delante. Cuando él habla me concentro todo lo que puedo. Quizá sea importante más adelante y si no lo recuerdo, podría perjudicarme”, explica.

Este también reconoce exprimir cada charla táctica para tratar de aportar y jugar lo más posible. “Cuando tienes 16 años, si eres lo suficientemente inteligente puedes intentar entender ciertos roles que el entrenador pide a los jugadores. Siempre he sido una persona táctica. Generalmente también en la vida pienso mucho en todo. Puedo pensar demasiado en las cosas, pero eso no es malo en el fútbol”, añade. Rico Lewis añade que cree que tiene trastorno obsesivo compulsivo. “Definitivamente tengo TOC. Cosas tontas como que si cierro la puerta, pensaré que no la he cerrado. Siempre tengo mi chándal fuera la noche anterior, independientemente de cuándo juguemos. Calcetines, boxers, zapatos, todo, para no tener que pensar en eso”, sentenció.

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