Vardy es eterno

Jugadores como Jamie Vardy deberían durar para siempre. El último superviviente del Leicester City que ganó la Premier League en 2016, máximo goleador de los foxes el curso pasado en Championship con 20 tantos y que renovó por una temporada más su contrato tras lograr el ascenso, partía como titular, a sus 37 años, en el regreso del equipo del King Power Stadium a la máxima división inglesa. Pero Jamie Vardy no quería ser protagonista por la lírica, sino por los hechos, y en el primer encuentro del curso liguero para Leicester City y Tottenham hizo lo que mejor sabe: marcar.

Los spurs se las prometían muy felices cuando, a la media hora de encuentro, Pedro Porro inauguraba la cuenta goleadora del Tottenham esta temporada y el marcador del King Power Stadium. El lateral español, pieza fundamental en el esquema de Ange Postecoglou, no quiere volver a ausentarse de ninguna convocatoria de la Selección española y permitió materializar la superioridad de los spurs. Hasta que apareció Jamie Vardy. Su cabezazo en el segundo tiempo, completamente libre de marco, desató la locura en el feudo del Leicester City (1-1). Aunque son muchos los goles del inglés los que ha celebrado la parroquia de los foxes, este tuvo un sabor especial.

Un ‘lateral’ con gol

Aunque el Tottenham visitaba la casa de Jamie Vardy, titular a sus 37 años en el regreso de los foxes a la Premier League, el ariete más activo durante los primeros 45 minutos fue el del conjunto londinense. Los pupilos de Ange Postecoglou buscaron constante y descaradamente a Dominic Solanke. El ex del Bournemouth, fichado este verano por 70 millones de euros, rozó el 0-1 en más de una ocasión. Incluso Wilfred Ndidi tuvo que sacar el balón sobre la línea para evitar que los spurs estrenasen el marcador.

Finalmente, a quien encontró James Maddison, gran generador de juego durante el primer tiempo para el cuadro visitante, fue a Pedro Porro. En la máxima expresión del ‘Ange-ball’, el lateral español apareció en el interior del área para rematar cual ‘9′, y de cabeza, el centro medido y preciso del mediapunta inglés, y poner así por delante en el marcador al Tottenham con su primer gol de la temporada. El curso pasado registró cuatro, pero es que la 2024/2025 la ha empezado de la mejor manera posible.

37 años son pocos

Igualmente dominadores del balón y el partido, los pupilos de Ange Postecoglou redujeron el acoso y derribo con el que atosigaron al Leicester City en los primeros compases del mismo. Pero el fútbol, y aún menos Jamie Vardy, no entienden de merecimientos. Cuando más cerca estaba el 0-2 del Tottenham, rozado hasta en dos ocasiones por Dominic Solanke y Rodrigo Bentancur, llegó el tanto del empate local, y cómo no, llevaría la firma de su capitán y veterano delantero. Jamie Vardy lleva muchos años metiendo goles, pero la zaga spur se olvidó de él a los 57 minutos de partido y solo tuvo que empujar con un testarazo al fondo de la red el centro de Fatawu Issahaku. Un asistente prometedor (20 años) y un artillero infalible. Tan solo Guglielmo Vicario evitó, pocos minutos después del 1-1, que el festejo de Jamie Vardy fuera doble. El inglés tuvo en sus botas el tanto del triunfo local antes de sustituido.

Rodrigo Bentancur dio el susto de la noche tras un fuerte choque de cabezas con Fatawu Issahaku. El uruguayo, que se llevó la peor parte, terminó abandonando el terreno de juego en camilla y con una máscara de oxígeno, pero consciente. Una imagen que ‘tranquilizó' a todo el estadio de los foxes después de ver cómo los jugadores se llevaban sobre el césped las manos a la cabeza. El parón no solo frenó el empuje del cuadro londinense, sino que a punto estuvo de costarles el punto que finalmente se llevaron de su visita al King Power Stadium.

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