Suenan alarmas en el Everton y Lampard avisa: “Tenemos un vacío en ataque”

Tuvo que remar a contracorriente el Everton, pero salvó la campaña frente al Crystal Palace. Evitó el que habría sido el primer descenso en 68 años. Ahora que vuelve a rodar la pelota, vuelven también los problemas. Después de perder por 0-2 frente al Arsenal en el primer amistoso de la pretemporada, los de Liverpool cayeron estrepitosamente frente al Minnesota United en Estados Unidos. Una serie de errores en defensa permitió que los norteamericanos gozasen de una ventaja de tres goles al descanso. Siguieron fallando los de azul en la segunda mitad. Dele Alli no aprovechó un centro pese a estar a escasos metros de una portería sin guardián. Abu Danladi cerró la cuenta poco después con el cuarto gol.

Dosis de realidad para un equipo al que le falta un nueve. La salida de Richarlison ha dejado un “vacío en ataque”, según explicó el propio Frank Lampard. El entrenador inglés avisó a jugadores, directiva y afición tras la derrota: “Hay que entender que estuvimos inmersos en la batalla para evitar el descenso durante gran parte de la temporada pasada. Tuvimos una noche increíble frente al Crystal Palace, pero tan pronto como acabó baje de la nube. Los jugadores deben hacer lo mismo, estuvimos en apuros por una razón. Si no queremos volver a estar en esa situación tienen que mejorar, y yo también tengo que hacerlo mejor”.

Son varios los nombres que se han asociado al club de Goodison Park a lo largo del verano, como Morgan Gibbs-White, del Wolverhampton, o Maxwel Cornet, del descendido Burnley. Pero nadie ha llegado para suplir a Richarlison: “Hemos perdido a un gran jugador con respecto a la temporada pasada. Le deseamos lo mejor, pero el club tiene que seguir adelante. También hay otras cosas en el equipo que quiero reforzar, y puedo ser honesto al respecto, porque un club como el Everton debe tener una plantilla competitiva”.

Las protestas de la afición contra Farhad Moshiri, propietario del club, se iniciaron la campaña pasada por la llegada de Rafa Benítez. Siguieron tras un paupérrimo inicio liguero y se prolongaron hasta casi sellada la supervivencia en la Premier League. Moshiri ha reiterado que el club no está en venta, aunque está abierto a que nuevos inversores se unan al proyecto. Algo que no satisface a la hinchada toffee, que ha convocado una nueva protesta el sábado a mediodía en los alrededores de Goodison Park. “La actual directiva del Everton, incluyendo el presidente Bill Kenwright, no alcanza los requisitos que un club de fútbol moderno necesita”, ha explicado en un comunicado la organización en la que se han reunido los aficionados descontentos con la gestión del club. “Solo quedan dos semanas para que empiece la temporada y el club lo está pasando mal en el mercado de fichajes después de vender a un jugador clave como Richarlison. Nada indica que la plantilla vaya a encontrar los refuerzos que tan desesperadamente necesita”.