“El Milan-Monza es el partido de mi vida”

El Monza visita hoy al Milan en la Serie A por primera vez en su historia. Será un partido inolvidable para el club, para su dueño, Silvio Berlusconi, y también para Adriano Galliani. El consejero delegado de los biancorossi ha vivido 31 años como directivo milanista, levantando 29 títulos legendarios. Le apodan “el Cóndor” por sus fichajes sorpresa en los últimos días del mercado y el fútbol le sigue emocionando como cuando era un niño loco por Di Stefano. El 18 de septiembre, el Monza logró el primer triunfo de su historia en la Serie A, y lo hizo ante la Juve. Galliani se fue del estadio a falta de 20 minutos, y se fue a la catedral de la ciudad lombarda. Allí una señora le avisó de la victoria. “Si cuando era chico hubiese dicho que, un día, el Monza habría batido a la Vecchia Signora, me habrían llevado a un manicomio”, dijo después.

Galliani, llegó el día del Milan-Monza.

-Es el partido de mi vida. Nací y crecí en Monza, donde he fundado mi empresa, ‘Elettronica Industriale’. Del 1975 al 1985 fui uno de los dueños del equipo biancorosso, del que fui hincha desde que mi madre, con cinco años, me llevaba al estadio. En 1979 le vendí la mitad de mi empresa a Berlusconi, había creado la red de transmisión para Canale 5, Italia 1 y Rete 4...

Y, allí, apareció el Milan.

-Berlusconi me pide dimitir del Monza y me convierte en consejero delegado rossonero. Seguiré en el cargo durante 31 años, conocen la historia.

Hasta que, en 2018, regresó a su primer amor.

-Sí, y ahí se cerró el círculo. Diez años en el Monza, 31 en el Milan, otros cuatro en el Monza: como ya le dije, es toda mi vida. Será una emoción increíble si pienso en todo lo que está pasando.

Están viviendo los mejores días en la historia del club.

-El club nació hace 110 años y gracias a Berlusconi acaba de llegar a la Serie A por primera vez. Cuando lo compró, llevaba 17 años sin disputar ni la Serie B. El sábado visitamos al Milan, en enero jugaremos con el Inter y con la Juve en la Copa italiana… Es algo que todavía no me creo. Decir un sueño se queda corto.

Es famoso en todo el mundo por sus celebraciones en el palco. ¿Cómo gestionará las emociones en San Siro?

-Llevo toda la semana entrenando mentalmente. Las cámaras me buscarán y voy a intentar no mover ni un músculo durante todo el partido. Goles, penaltis, VAR: mi cara será la misma, neutral. Sé que no me van a creer, pero mi intención es esta. Será el único partido en el que no será tifoso ni de un equipo, ni del otro. Después, volveré a serlo.

Tras un comienzo con cinco derrotas y un empate, su equipo ha renacido con Palladino en el banquillo, otra intuición vuestra. Solo había entrenado a juveniles.

-Raffaele llegó en 2019 para jugar con nosotros y una lesión se lo impidió. Sin embargo, me dio enseguida la impresión de ser alguien especial. Pasó por los equipos sub-15 y Primavera, en ambos lo hizo muy bien. Decidimos destituir a Stroppa, al que siempre estaré agradecido por habernos llevado a la Serie A, le propuse a Berlusconi apostar por Palladino y cenamos con él. Después, en cinco partidos, sumamos cuatro victorias y una derrota. No conozco el futuro, pero con Raffaele hay un espíritu nuevo. Lo está haciendo muy bien.

Hablando de futuro, ¿qué debemos esperar del Monza en los próximos años?

-Monza no puede ser Milán, Barcelona o Madrid. Tenemos otros modelos, como los de Udinese, Atalanta, Sassuolo o, en España, el Villarreal. Conozco bien los Roig, el Submarino Amarillo lleva muchos años haciéndolo genial. Nuestra esperanza es seguir ese tipo de camino.

¿Volveremos a verle negociar con el Madrid, como en los mejores años del Milan?

-El canal personal con Florentino y José Ángel Sánchez nunca se interrumpió, esperamos hacer algo juntos en el futuro. También hay grandes relaciones con Laporta del Barça, Miguel Ángel Gil y Berta del Atleti…”.

Berlusconi y usted son expertos en Balones de Oro, y su amigo Florentino acaba de celebrar el de Benzema.

-Fue un galardón merecidísimo. Muchas veces, en la vida, debes ser bueno en algo, pero también encontrar a alguien que lo entienda, que te quiera, que te estimule, que te empuje… Y creo que Benzema le debe muchísimo a su presidente. El francés, como todos los futbolistas, tuvo algún altibajo, pero Florentino le apoyó porque siempre estuvo futbolísticamente enamorado de él. ¡Siempre!”.

Y Ancelotti, en Madrid, sigue haciendo historia.

-Con Carlo se equivocan. Dicen que ha ganado cuatro Champions, pero… ¡Son seis! Con el Milan también levantó dos siendo jugador. Es el más grande y punto. Nadie ganó las cinco ligas top y creo que nunca volveremos a ver algo parecido. Solo él puede hacer algo así.

Le sigue animando en cada partido, entonces.

Por supuestísimo. Con Carlo seguimos teniendo una gran relación. Y, además, para mí el Madrid es especial desde siempre. Ya les conté que, siendo niño, me emocionaba con Di Stefano y, ya como directivo del Milan, me conmovía cada vez que me cruzaba con él en alguna comida. Eso no se olvida.