Ramón Díaz enciende a Vasco

En menos de un año la carrera de Ramón Díaz ha dado un gran vuelco en los banquillos. De disputar la final del Mundial de Clubes ante el Real Madrid al frente del Al Hilal, a volver a Sudamérica para asumir un reto mayúsculo para salvar al histórico Vasco da Gama. En ambas una cosa queda clara con el argentino, y es su capacidad y adaptabilidad a las distintas situaciones que le ha ido poniendo el fútbol por delante. En todas ellas, sabiendo que la motivación es un gran recurso para alcanzar los objetivos, y asumiendo que de la confianza pueden nacer grandes cosas para llegar a la meta.

La última victoria del conjunto de Río de Janeiro ante Fluminense parece que ha causado un gran revuelo dentro de la plantilla y la hinchada. Ramón Díaz ha sido consciente de ello, y en un alarde de positividad por la institución de la que está formando parte hoy en día, el ex de River Plate sacó pecho en la rueda de prensa posterior al partido para decir ante los micros que Vasco no va a bajar. “Este es un mensaje para la gente de Vasco y para todo el mundo: hagan lo que hagan, Vasco da Gama no va a bajar”, expresó con rotundidad un entrenador que a lo largo de su carrera se ha caracterizado más por sumar títulos que salvar equipos.

La realidad actual del equipo es complicada. Involucrado en los puestos de descenso, cada punto que suman en Vasco supone una gran bocanada de aire para tratar de alcanzar al salvación. Una posibilidad que no se encuentra lejos (están a pocos puntos de salir de los cuatro puestos que dan lugar a la Serie B), pero que a la vez dan vértigo para un equipo que quiere continuar creciendo en el Brasileirao . Con la reciente llegada de Dimitri Payet al club, parece que el optimismo va tomando algo de forma en todo lo que rodea al equipo de Ramón Díaz. El argentino tiene claro que es un paso importante para la permanencia, y aunque todavía quedan muchas jornadas por disputar cada enfrentamiento es una final.

Si las charlas supusieran ganar partidos, el entrenador nacido en La Rioja ya habría dado varios puntos a su equipo. Con tres victorias, dos empates y tres derrotas desde que llegara en julio, las palabras han sido una vía para motivar a sus jugadores. “Con cualquiera tenemos que competir. Es un gran club este, tienen que competir. Disfruten, pero ojo, el jueves jugamos otra vez... No te relajés, no hay que relajarse porque es muy importante. No hay que relajarse. Yo no me voy a relajar y ustedes tampoco”, dijo a sus jugadores tras ganar a Flu en una charla que publicó el propio club. Demostración de que Ramón Díaz tiene un liderazgo que está tratando de despertar a todos los que le rodean.

Por si fuera poco la figura de Ramón, su hijo Emiliano también ha sido participe de la arenga a la plantilla de Vasco. Una figura inseparable a la de su padre desde que colgó las botas, y que complementa a la perfección lo que se busca para salvar al equipo y mantenerlo en la Serie A. “¿Saben cuál es el significado de esto, de esta prenda? -explicaba agarrando la camiseta- Resistencia. Contra todo y contra todos. Este grupo tiene que honrar esta camisa... Tienen el privilegio de vivirlo. Este grupo se tiene que preparar para que haga historia este club. Todos juntos porque ya lo demostraron. Cuando la gente quiere jugar, va y juega. Cuando la gente quiere luchar, va y lucha. Porque Vasco y este grupo va a hacer historia... Por nosotros, la familia, por todos los que venimos sufriendo este tiempo. Pero tienen que estar preparados.”, manifestó Emiliano Díaz antes de que saltaran al campo ante Fluminense.

En un momento donde las dudas emergen, en Vasco disponen de un técnico de gran talla Mundial para despejar las dudas. En una lucha por el descenso que tiene involucrados a varios históricos como Santos, Corinthians y no muy lejos a Sao Paulo o Internacional, la baza del banquillo puede marcar la diferencia para que las cosas sucedan. Y aunque todo se bate sobre el terreno de juego, Ramón Díaz está sabiendo escoger las palabras para que la entidad y todo lo que la envuelve sean uno en esta lucha hasta el final de la temporada.