Presión asfixiante para el Benfica

La liga portuguesa sigue muy abierta y eso es noticia, porque apenas hace 15 días parecía decidida a favor del Benfica, con diez puntos de ventaja. Pero el Oporto, tras su victoria en el estadio del Paços Ferreira (0-2), duerme a un solo punto de los lisboetas, que reciben este domingo al Estoril bajo una tremenda presión. Al Oporto le costó sacar adelante el encuentro. Tuvo oportunidades en la primera mitad, incluso un penalti que anuló el VAR, pero no logró abrir el marcador. No obstante, el encuentro le sonreía, ya que antes de irse al descanso, el escocés Holsgrove veía la segunda amarilla. Los de Conceiçao tendrían toda la segunda mitad con superioridad.

Tras el descanso, los dragones se volcaron a por el gol, lo que también les acarreó algún susto. Pepe demostró su fantástica forma a sus 40 años para pegarse una enorme galopada y tapar el lanzamiento de Guedes, que se había plantado solo frente a la portería de Diogo Costa. Pepe y Evanilson pudieron marcar para el Oporto, aunque el gol llegó de penalti, otra vez con intervención del VAR. Taremi no falló desde los once metros.

La guinda la puso el español Toni Martínez, que apenas unos minutos después de incorporarse al partido cazó un balón suelto en el área para certificar la victoria. Su cuarto gol en Liga para un triunfo clave en la lucha por el título. Una competición que parecía perdida para su equipo, y en la que ahora se encuentra a un punto (con un partido más) de un Benfica que lleva un mes para olvidar: eliminado de Champions ante el Inter y casi toda su renta desperdiciada en la competición liguera.