Mourinho: “Confieso que salí al campo con un micrófono, para protegerme...”

La visita de la Roma a Monza no salió como esperaba José Mourinho. El equipo romano no pasó del empate y además acabó con un jugador expulsado. Tras terminar el choque, el portugués analizó cómo había ido. Habló del cansancio de sus jugadores, de la corta plantilla que tiene, y lo más destacado, la crítica que le hizo al colegiado.

“No es fácil, teníamos gente en el campo que tenía mucha dificultad en cuanto al cansancio. Los chicos lo dieron todo, gente como Mancini, Pellegrini, Cristante... Es gente que juega y todavía no tiene calidad para mantenerse en este nivel. El banquillo es prácticamente inexistente. Jugaron con orgullo y por eso estaré con ellos hasta el último minuto esta temporada”, comenzó su discurso post-partido.

“Chiffi es el peor árbitro que he conocido en mi carrera. No influyó mucho en el resultado, pero es pobre. Técnicamente pésimo, no es empático, no se relaciona con nadie, le da tarjeta roja a un jugador que resbala porque está muerto de cansancio en el minuto 96. La Roma no tiene la fuerza que tienen otros equipos para decir que no queremos a ciertos árbitros. Aunque a veces me parece que no tienen ni ganas... La Roma también debe crecer en este nivel...”.

“Dejé de trabajar los últimos 20 minutos porque sabía que de lo contrario hubiera recibido una tarjeta roja, siempre pasa con él. Confieso que esta noche salí a la cancha con el micrófono, para protegerme. Me quedé callado porque el sábado quiero estar con mis pocos jugadores en el campo contra un súper equipo como es el Inter...”, sentenció Mourinho.

Mourinho, investigado

Las declaraciones de Mourinho no han pasado desapercibidas en Italia. Unas horas después se conoció que se tomarán medidas sobre ellas. El fiscal federal Giuseppe Chinè ha abierto una investigación para referir a José Mourinho tras las palabras pronunciadas contra el árbitro Chiffi al final del partido contra Monza.

Hay que recordar, además, que el entrenador es reincidente. Por lo que corre el riesgo de que The Special One no pueda sentarse en el banquillo el próximo fin de semana ante el Inter, donde se juega entrar en puestos europeos.

La Roma está a día de hoy séptimo en la clasificación de la Serie A, empatado a puntos con Milán y Atalanta. Y a dos puntos del Inter, que ocupa la última plaza de Champions. Este tropiezo ante el Monza ha supuesto un frenazo en las aspiraciones para la próxima temporada.