Mbappé, sin cláusula de salida

Cuatro meses después de su flamante renovación, la burbuja de Kylian Mbappé ha vuelto a estallar. El delantero, arrepentido de su ampliación de contrato, quiere dejar el PSG lo antes posible. Se siente traicionado por Al Khelaïfi y Antero Henrique, no juega en la posición que más le potencia y espera que su club le deje salir en enero. Una voluntad que, sin embargo, no depende exclusivamente del futbolista.

Según el reglamento de la LFP (liga francesa), las cláusulas de rescisión están prohibidas en Francia. Es decir, que si algún club quiere fichar a Kylian Mbappé en enero, deberá llegar antes a un acuerdo con el PSG. Un PSG que no quiere venderle. Según ‘RMC Sport’, Al Khelaïfi considera que todas las informaciones que circularon sin freno a lo largo del miércoles son un golpe de presión del clan Mbappé para, entre otros objetivos, influenciar internamente a otros jugadores.

Por tanto, la salida del talento de Bondy podría prolongarse, si el Emir actúa como ya lo hiciera en verano de 2021, hasta 2024. Aunque en el anuncio de su renovación, Kylian Mbappé posó con una camiseta del PSG hasta 2025, la realidad es que su contrato expira en dos años, es decir, justo antes de la celebración de los Juegos Olímpicos de París en los que será, sin duda, uno de los grandes abanderados del combinado nacional francés.

Según ‘Foot-Mercato’, incluso semanas después de haber estampado su firma de renovación, varios clubes se interesaron en Kylian Mbappé. Antero Henrique, encargado del mercado de fichajes del PSG, solicitó 400 millones por su estrella, en una clara evidencia que su arrepentimiento no viene de ahora, sino de hace tiempo, concretamente en el inicio del mercado de fichajes. Al Khelaïfi le bañó en una serie de promesas que se han ido diluyendo poco a poco.

‘France-Bleu’', por su parte, va más allá en los términos en los que Mbappé ha expresado su decepción con las promesas del PSG. Según la prestigiosa radio francesa, el atacante le dijo a su familia que se había equivocado con la renovación, ya que el PSG no ha hecho posible la revolución que le vendió allá por el mes de abril, cuando las negociaciones por su ampliación de contrato entraron en su fase decisiva. “Nos equivocamos y yo fui el primero en equivocarme”, habría dicho el crack del PSG.

Neymar debía ir fuera

En el proyecto parisino que habían diseñado las altas esferas del actual líder de la Ligue 1 no estaba Neymar. El brasileño fue incluido en la lista de transferibles en verano por el PSG, pero ningún equipo de Europa pudo asumir su ficha. Toda una declaración de intenciones, ya que sin el exjugador del Barcelona, Mbappé sería el único líder del proyecto. Neymar no se fue, es más, renovó automáticamente hasta 2027, cambió sus hábitos, como adelantar una semana sus vacaciones y se convirtió en el mejor jugador del PSG en este inicio de temporada. Mbappé no daba crédito.

Otro problema que se ha encontrado en París es la posición en la que le está utilizando Galtier. En verano, Luis Campos intentó fichar a un 9 para que Mbappé jugara con libertad, pero finalmente, tras sondear a Rashford o Lewandowski, no llegó el delantero deseado. En septiembre, durante el parón internacional, Mbappé confesaba que se sentía más cómodo jugando en la selección que en el PSG. “En la selección tengo a Giroud de referencia. Puedo moverme con más libertad. En el PSG no existe eso”. Este sábado, después de empatar ante el Reims, Mbappé subió una historia a Instagram que incluía el hastag “#PivotGang”, término con el que definió su posición en el PSG en aquellas declaraciones.

Aunque su entrenador, Christophe Galtier, trató de calmar las aguas en la previa del encuentro ante el Benfica, la realidad es que Mbappé quiere dejar el PSG cuanto antes. En agosto de 2021, Leonardo, ya exdirector deportivo de los parisinos, reconocía que el delantero quería salir traspasado y no libre, con el objetivo de dejar dinero en las arcas del club para encontrarle un sustituto. ¿Cambiará ahora el Emir su actitud o seguirá remitiéndose al cumplimiento de su contrato? En enero saldremos de dudas.

Su madre reacciona en redes a un tuit sobre toda la polémica

Lamari Fayza alimentó aún más este miércoles la situación al reaccionar con un me gusta a un tuit publicado por el periodista Grégory Schneider, del diario Libération. El post explicaba que “hay que escuchar a Mbappé antes de sacar conclusiones, porque a menudo cuando él habla se observan las cosas de forma diferente”. Lejos de aplacar los ánimos, la reacción de la madre confirma que la batalla está servida en este momento y que la relación con el club está rota a día de hoy. Esas explicaciones podrían llegar en el clásico contra el Marsella del próximo fin de semana, si es que el jugador está disponible para ese partido. Se marchó tocado del duelo contra el Benfica y fue sustituido por precaución.

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