Dembélé revivirá su peor pesadilla culé

Ousmane Dembélé se postula como uno de los nombres clave de la fastuosa eliminatoria que enfrentará al PSG y al Liverpool y que da el pistoletazo de salida este miércoles, en el Parque de los Príncipes, en el primero de los dos envites que medirá a dos de los mejores equipos de Europa en la actualidad. El francés, máximo artillero del 2025, con 18 goles, deberá ratificar su exuberante momento de forma en una doble confrontación que no será apta para cardiacos.

Seis años después, el internacional francés volverá a verse las caras con el Liverpool, rival del que guarda un aciago recuerdo, ya que los Reds, en unas semifinales dramáticas, truncaron el sueño del Barcelona en 2019 de lograr su sexta ‘Orejona’. En el encuentro de ida, disputado en el Camp Nou, el Barça se llevó a Inglaterra una holgada ventaja de tres goles que pudo ser mayor si Ousmane Dembélé, en el último minuto, no hubiera perdonado una ocasión inmejorable.

En el tiempo de descuento, con 3-0 en el marcador, el Liverpool sacó un córner en el que envió a todos sus jugadores a rematar, consciente de que un gol cambiaba por completo el devenir de la eliminatoria. En el rechace, el Barcelona inició un prominente contragolpe. Messi recibió en la izquierda y, tras levantar la mirada, asistió a Dembélé para que marcara a placer. El 4-0 habría sido casi definitivo y el francés, sin embargo, con todo el viento a favor, incluso con posibilidad de acomodarse el esférico, sin ningún rival encimándole, disparó al cuerpo de Alisson, que atemperó la pelota con suma facilidad.

Vuelta infernal

Inmediatamente después de la oportunidad, flagrante, el colegiado Kuipers señaló el final del partido. Dembélé, con un semblante cabizbajo, abandonó el terreno de juego sabedor de que esa ocasión habría sido la estocada definitiva al Liverpool. El Barcelona, aun así, viajó a Anfield con una renta importante, pero una concatenación de errores defensivos y la asfixiante presión de los de Klopp consumaron una remontada, 4-0, que supuso un golpe durísimo para el conjunto blaugrana.

El Barcelona no ha vuelto desde entonces a disputar las semifinales de la Champions, con una crisis económica devastadora de por medio, mientras que Dembélé, en agosto de 2023, formalizó su traspaso al Paris Saint-Germain.

Después de un año de adaptación, ejerciendo de escudero de Kylian Mbappé, el exjugador del Barça se ha destapado en este comienzo de año como uno de los futbolistas más prolíficos de Europa, sino el que más.

Gran momento

A pesar de las dificultades que pusieron en jaque su importancia en el PSG a comienzos de temporada, protagonizando un episodio tenso con Luis Enrique antes de un partido de Champions contra el Arsenal, derivando en su desconvocatoria por motivos disciplinarios, Dembélé ha revertido la balanza y ha firmado los mejores números de su carrera.

Antes de medirse al Liverpool, el canterano del Rennes ha acumulado 32 participaciones de gol en 33 partidos, 26 goles y 6 asistencias, 18 goles en 2025, superando su mejor marca en un año, 14, números que arrojan que su metamorfosis es total bajo la tutela de Luis Enrique.

El asturiano le ha transformado, convirtiéndole en un ‘9′ letal, posición en la que Dembélé, mucho más centrado, tiene más capacidad de marcar las diferencias después de un regate o una finta. El miércoles, contra el Liverpool, el mejor equipo de la Champions League en cuanto a números se refiere, el francés quiere redimirse de esa ocasión que le ha acompañado durante tantos años y que muchos utilizaron para definir su nivel en la élite. Una revancha, una venganza, una redención para Dembélé, imparable desde que arrancó 2025.

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