¡Haaland-Sorloth, qué pareja!

Noruega es líder de su grupo en la Liga B de la Nations League gracias al rendimiento de su pareja de delanteros: Haaland y Sorloth. El ariete del City, que marcó un doblete y dio una asistencia, y el rojiblanco, otro tanto y un pase de gol, fueron los grandes protagonistas del triunfo en Oslo ante la Eslovenia de Oblak, que salvo un tramo de primera parte, no pudo con los nórdicos, que rindieron bien a pesar de la importante baja de Odegaard.

Los locales salieron a morder desde el principio. Asedio total a la portería de Jan Oblak, que intentaba despejar las acometidas como podía. Sorloth y Haaland acumularon las primeras ocasiones. Y fue precisamente al gigante del City al que le cayó el balón tras una magnífica estirada de Oblak. Con la pelota controlada y el portero intentando incorporarse, Haaland no falló para abrir el marcador.

El 1-0 en apenas siete minutos parecía ser el principio de un festival noruego, pero lo cierto es que el paso de los minutos sirvió para asentarse en el encuentro. Sporar y Sesko avisaron y Nyland, el meta noruego del Sevilla, estaba cada vez más presente. Hasta el punto de salvar el empate tras un remate durísimo de Cerin tras un córner. De hecho, Haaland, en labores defensivas por el saque de esquina, tuvo que despejar en segunda instancia como si de un central se tratase para evitar el rechace.

La importancia del punta del City de Guardiola es indiscutible en cualquier equipo en el que juegue. Pero en el segundo tanto noruego, al comienzo de la segunda mitad, se hizo aún más evidente. Presionó la salida del balón, provocó el error, recibió, aguantó las acometidas de la defensa, evitó a dos rivales casi desde el suelo y aún le dio tiempo de servirle en bandeja el gol a Sorloth, que no falló. El delantero del Atlético marcó su segundo tanto de la temporada, ya que solo suma uno de rojiblanco.

Pero el colchonero estaba muy activo y aprovechó para devolverle el ‘caramelito’ a su compatriota. Un contragolpe acabó con un balón escorado a Sorloth, que rápidamente buscó al ‘cyborg’. Su pase le sirvió a Haaland para completar el doblete (suma tres goles en tres partidos) ante un Oblak que poco más podía hacer. Y es que cada movimiento del máximo goleador de la Premier hacía temblar a Eslovenia. A punto estuvo de hacer el cuarto, pero su cabezazo se fue alto. Y es que Noruega supo controlar el resto del encuentro ante una Eslovenia que sí acumuló ocasiones, pero le faltó puntería y suerte. Toda la que le sobró a Haaland y Sorloth, un ataque que se entiende a las mil maravillas.

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