Festín del Inter ante el Bolonia: 6-1

El Inter se rehizo rápidamente de la derrota sufrida ante la Juventus en Turín dándose un festín ante el Bolonia, que se fue de San Siro con seis goles en contra y un resultado que interrumpe una racha de tres triunfos consecutivos.

Los de Thiago Motta se derritieron tras un muy buen comienzo, en el que se adelantaron en el 22′ gracias a un disparo de Orsolini, que golpeó a Lykogiannis y batió a Onana.

El gol fue lo único bueno para los rossoblú, cuya pesadilla comenzó con una espectacular volea de Dzeko, que puso las tablas después de un centro de Dumfries desviado por el mismo griego. Después, Lautaro forzó una falta en el límite del área (muy dudosa) que causó primero un rifirrafe con Medel (amonestado, como el delantero) y, luego, el 2-1 de falta, anotado por Dimarco. El argentino, antes del descanso, sentenció la contienda con un testarazo en un córner lanzado por Calhanoglu, dejando la reanudación cuesta abajo.

Tras un remate al larguero de Dzeko, Dimarco abrió la segunda parte con una bonita rosca tras un gran regate ante Sosa, que valió el 4-1. En el 58′, una mano del mismo defensa causó un penalti materializado por Calhanoglu y, en el 77′, Gosens puso la guinda empujando entre palos un centro de Dzeko. Asllani hasta rozó el séptimo con otro disparo al poste, cerrando una noche perfecta para los de Inzaghi, que superan a la Roma y marchan cuartos. Turín ya quedó atrás.