Éxtasis del Arsenal ante Emery
Dos goles en el descuento dan los tres puntos a los ‘Gunners’. La suerte favoreció a Mikel Arteta en el gol en propia puerta de Emi Martínez. Philippe Coutinho marcó su primer gol de la temporada.
Los primeros 45 minutos no pronosticaban un buen devenir para los pupilos de Mikel Arteta. Ollie Watkins y Philippe Coutinho ahondaron en la herida Gunner, que no sabía lo que era ganar desde hacía un mes. Pero los londinses no habían dicho su última palabra. La suerte y la cabeza de Emi Martínez se aliaron con los londinenses cuando todo parecía perdido. Los de Mikel Arteta fueron a remolque durante todo el partido, pero consiguieron igualarlo hasta en dos ocasiones gracias a los tantos Bukayo Saka y Oleknsadr Zinchenko. Unai Emery parecía tenerlo casi todo bajo control, pero no contaba con el zapatazo de Jorginho en el 94′. El Arsenal vuelve a situarse como líder de la Premier League a falta de que los Citizens se midan al Nottingham Forest. Mikel Arteta respira.
El Arsenal es un coladero
Durante la primera mitad del curso, el Arsenal de Mikel Arteta había transmitido ser un equipo fiable atrás a la par que divertido. En tan solo un mes, la fragilidad defensiva y escasa frescura mostrada por los Gunners en ataque están haciendo estragos en las aspiraciones del equipo londinense de proclamarse campeones de la Premier League. Un ex del Arsenal como Unai Emery tampoco pondría de su parte. A los cinco minutos de encuentro, Ollie Watkins puso otra losa más en el tortuoso mes de febrero para los Gunners. Robo y conducción de Matty Cash desde campo propio, y gran definición del delantero inglés con un disparo cruzado. Cuatro goles consecutivos en sus últimos cuatro partidos para él.
Menos mal que Mikel Arteta tiene a su propia estrella. Al igual que ya hiciera tan solo unos días atrás contra el Manchester City, Bukayo Saka se encargó de igualar el marcador contra el Aston Villa. Y de qué manera. Si minutos antes Tyron Mings salvó sobre la línea el tanto del empate visitante, el extremo del Arsenal convirtió un mal despeje de su compatriota en una volea maravillosa. El zurdazo imparable del ‘7′ del Arsenal ponía el 1-1 en el electrónico a los 15 minutos. Los visitantes tenían aún mucho tiempo por delante para darle la vuelta al resultado. Sin embargo, el tanto de la gran estrella Gunner no fue más que un espejismo.
Quién lo diría, pero es demasiado fácil hacerle daño al que hasta el pasado miércoles había sido el líder de la Premier League. Álex Moreno rompió al espacio en el costado zurdo, puso el balón atrás para Philippe Coutinho y el brasileño, con un disparo cruzado, batió a Aaron Ramsdale. Media hora de encuentro y los de Mikel Arteta ya habían encajado dos tantos. Y es que el cuadro londinense no deja la portería a cero desde el Derbi del Norte de Londres, disputado un mes atrás: 10 goles en contra en los últimos seis partidos. La frustración y rabia de los jugadores londinenses empezó a traducirse en precipitaciones y enfrentamientos con los Villans, que lo único que hicieron fue entorpecer el devenir del partido.
Un poco de suerte y mucha fe
Los pupilos de Mikel Arteta no había dicho su última palabra. O al menos, iban a intentar no ponérselo tan fácil ni al Manchester City ni al propio Aston Villa. El cabezazo de Eddie Nketiah que rechazó el larguero a los 10 minutos de la segunda parte hizo de telonero del tanto del empate Gunner. El segundo golazo de la tarde para los londinenses. Oleksandr Zinchenko enganchó un gran disparo desde la frontal del área tras sacar un córner en corto para hacer su primer gol con la elástica del Arsenal, el primero de su carrera en la Premier League tras 92 partidos. El lateral izquierdo ucraniano, a pesar de partir desde la banda izquierda, es cada día más influyente en el juego de los suyos. Uno de los futbolistas más destacados de la temporada del Arsenal.
A partir de ahí, las ocasiones no hicieron más que sucederse para el cuadro visitante. Eddie Nketiah, que no ve portería desde el pasado mes de enero, falló un mano a mano. Pero aún más clara fue la ocasión errada por Martin Ødegaard. El delantero inglés recuperó el balón tras una mala salida desde atrás de los Villans y regaló el gol al noruego, pero la mandó fuera con la portería vacía. Ni Eddie Nketiah ni el propio Martin Ødegaard podían creérselo. Con el equipo londinense volcado en ataque en busca de los tres puntos, los de Unai Emery también las tuvieron. Un larguero y posterior mano a mano de Leon Bailey pudieron acabar con las aspiraciones visitantes, pero lo mejor estaba por llegar.
Seis minutos de añadido y la suerte decidió aliarse con el Arsenal cuando apenas restaban dos para el final. Lo que iba encaminado a ser el tercer golazo de los Gunners en Villa Park terminó convirtiéndose en un tanto en propia puerta de Emi Martínez. El chutazo de Jorginho se estrelló en el travesaño y el rebote del mismo fue a parar a la cabeza del arquero argentino del Aston Villa, ex del Arsenal. Cuando, desde el suelo, el vigente campeón del mundo se giró, el balón ya estaba dentro de la portería. A los locales no les quedaba otra que intentar la machada en la última jugada del partido. Emi Martínez subió para un saque de esquina y, a la contra, Gabriel Martinelli marcó a la contra, y con toda la portería para él, el definitivo 2-4. El Aston Villa y Una Emery pagaron los platos rotos de la derrota Gunner ante el Manchester City