Emery tiene un Leon

En una primera parte soberbia, el Aston Villa de Emery solventó el choque ante el Nottingham Forest con tres chispazos. Y eso que el Nottingham nunca bajó los brazos y le puso pimienta al partido en una buena segunda mitad.

El primer zarpazo lo dio el jamaicano Leon Bailey a los cuatro minutos. Él solo le regaló el primero gol de la tarde a Ollie Watkins. El extremo adornó su asistencia con dos cañitos que ruborizaron la endeblez de la defensa visitante. Watkins, en estado de gracia, se limitó a empujar a portería casi vacía.

Fueron los mejores momentos del ex del Leverkusen que poco después pudo hacer el segundo. El Aston Villa no encontraba oposición en un Forest que todavía no había hecho acto de presencia en Birmingham. Astillas hizo Douglas Luiz con la rigidez de la defensa del Nottingham. El villano favorito de los seguidores de Villa Park logró un doblete en diez minutos que parecía sentenciar el choque. Un escándalo el brasileño, que tiene una facilidad inusitada para hacer goles.

Bajó el ritmo del Aston Villa y casi lo pagó caro. Antes del descanso, el enésimo gol que regala del equipo de Emery tras una jugada a balón parado hizo soñar al Nottingham. Y a la vuelta de los vestuarios, un efectivo Gibbs-White sumaba un tanto al hecho por Niakhate con anterioridad en el marcador visitante. Del jolgorio y la fiesta al silencio sepulcral. Había miedo de pinchar de nuevo.

La tensión se mascaba en el estadio. Cuando más sufría el Aston Villa... otro zarpazo del león. Bailey llegaba desde la segunda línea para apaciguar la reacción de los de Nuno Espíritu Santo. Merecida ovación al jamaicano en el tramo final cuando fue sustituido. El Villa sigue cuarto, en puestos Champions. El Nottingham debe seguir remando para salir de abajo.

Dunk agarra un empate amargo para el Brighton

Un tanto de Lewis Dunk en el minuto 96 agarró un empate amargo para el Brighton, en el que marcó Jarrad Branthwaite, que no pudo con el Everton (1-1) y dio un paso atrás en sus opciones de terminar la temporada en uno de los puestos con acceso a Europa. El Crystal Palace no desperdició su oportunidad de hundir a un rival directo en su pelea por alejarse de los puestos de descenso y ganó 3-0 al Burnley con los goles de Chris Richards, Jordan Ayew y Jean-Phillipe Mateta en los últimos veinte minutos del partido.