El PSG tiene un problemón

El PSG tiene un problemón de cara a puerta. En la Ligue 1 puede permitirse el lujo de tropezar, pero la Champions no espera a nadie y su falta de gol puede acarrearle incluso una eliminación en la máxima competición continental. Los parisinos fueron infinitamente superiores al Auxerre y, aunque volvieron a generar un sinfín de ocasiones, todas repelidas por un heroico Donovan Leon, portero del recién ascendido, no pudieron pasar del empate a cero, sumando su tercer pinchazo consecutivo, dos en Champions y uno en la liga francesa, que confirman una pequeña crisis antes de jugarse la vida esta semana en Europa contra el Salzburgo.

Necesitaba Luis Enrique contener el incendio interno que se había propagado a lo largo de la semana pasada. Después del empate contra el Nantes, justo tras la derrota en Múnich en Champions, en Francia habían circulado rumores de que los jugadores ya no entendían el método del técnico asturiano. Impasible en rueda de prensa, desmintiendo las noticias de los periodistas, el exseleccionador español salió en Auxerre, que llevaba cinco victorias en seis encuentros en casa, con Fabián Ruiz en la medular y con Dembélé otra vez en el banquillo. La relación entre el técnico y el exjugador del Barça no atraviesa su mejor momento y prueba de ello son sus dos suplencias consecutivas.

Al PSG le volvió a costar, como hace una semana ante el Nantes, desarbolar en el primer tiempo un repliegue muy trabajado. El Auxerre dejó claras sus intenciones desde el primer minuto: repliegue con cinco defensas y cuatro centrocampistas, cediéndole el monopolio de la posesión a un equipo que, aunque tuvo oportunidades para irse con ventaja al descanso, volvió a abusar de las posesiones estériles con muchos pases de más.

Fabián Ruiz, de hecho, adelantó al Paris Saint-Germain, en una gran ruptura de Barcola, pero el extremo, ligeramente, se encontraba en posición antirreglamentaria. El árbitro ratificó el fuera de juego. Y el PSG, con un buen Nuno Mendes, esta vez sí en su posición y no de central en la salida de balón, generó mucho peligro en el sector izquierdo. Gonçalo Ramos la tuvo de cabeza, pero un buen Donovan Leon también postergó el 0-1.

No se rindió pronto el Auxerre, que fue creciendo con el paso de los minutos. Liderados por un buen Hamed Junior Traoré, al que se le queda pequeño, muy pequeño el recién ascendido, los de la Borgoña encontraron espacios al contragolpe. Sin embargo, la paciencia, tan necesaria en partidos como ante el PSG, fue lo único que le faltó para intentar, con osadía, poner en jaque al líder de la Ligue 1.

El PSG salió a morder en el segundo tiempo, pero la mala suerte y un inconmensurable Donovan Leon, con hasta seis paradas de mérito, evitaron que los de Luis Enrique se pusieran por delante nada más salir del túnel de vestuarios. El técnico asturiano, desesperado en la banda por la desdicha que azota a su equipo, decidió meter a Dembélé, Kolo Muani y Doué y termino con Marco Asensio en el terreno de juego. Un bestial Donovan Leon, salvando todas las llegadas del PSG, incluido un mano a mano en el 92 con Kolo Muani, amarraron un empate heroico del recién ascendido Auxerre frente a un PSG estrellado de cara a puerta.

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