El Nápoles, Sorrentino y una fiesta de cine
El club sureño ya dejó imágenes históricas durante la pasada semana. Sin embargo, como dijo el ganador del premio Oscar, “la fiesta durará para largo…”.
La fiesta del Nápoles ya ha regalado imágenes para la historia, pero no ha hecho más que empezar. Entre la invasión de Udine y, a la vez, el Maradona lleno con pantallas gigantes, la inolvidable noche vivida con la Fiorentina tres días después y una ciudad pintada de azul desde principios de marzo, los napolitanos, como escribió ‘The Guardian’, “le enseñaron al mundo qué divertido puede ser coronarse”. Aurelio De Laurentiis quiso unas celebraciones monumentales y, gracias al campeonato dominado por su equipo, lleva meses trabajando en el asunto con Tommaso Bianchini, jefe del desarrollo internacional de la entidad desde hace poco más de un año.
Los tifosi están encantados con el crecimiento de la marca azzurra, que aprovechó el scudetto para consolidarse y en los próximos meses lanzará una serie al estilo de ‘The Last Dance’, que se está grabando desde el comienzo de este curso y no pudo tener mejor final. El domingo, el Nápoles ya dio una prueba de lo que puede ser capaz de hacer. Después de la victoria con la Fiorentina (en un Maradona ya increíble con banderas y tifos), empezó un largo show de luces, música y colores. La pista de atletismo fue cubierta por una alfombra de luces y pantallas donde desfilaron cantantes, artistas, jugadores y directivos, acompañados por un espectáculo de fuegos artificiales que dio la vuelta al mundo. Fue un éxito rotundo al que participó también el mismísimo Paolo Sorrentino.
El ganador del premio Oscar está grabando su nueva película en su ciudad, es tifoso napolitano desde la cuna y lo dejó claro cada vez que pudo en sus obras. Asistió al Nápoles-Fiorentina como un recogepelotas más, reconociendo que fue “diez veces más bonito que hacerlo en la grada”, porque “la velocidad del fútbol, vista de cerca, es algo banalmente hermoso”.Sorrentino avisó de que, “aunque algunos digan que ya vale, la fiesta napolitana durará para largo”. Tiene razón porque, de hecho, el evento más esperado todavía no tuvo lugar. El 4 de junio el Nápoles levantará el trofeo de campeón de Italia y lo celebrará también por las calles de la ciudad, en varios palcos que el club y el ayuntamiento van a posicionar en distintos barrios. Si lo del pasado domingo ya fue de cine, la gran pregunta es qué inventarán De Laurentiis, Bianchini y los tifosi para el colofón de una temporada legendaria.