El Fulham amarga las uvas a Arteta

La última vez que el Arsenal perdió dos partidos de Premier League consecutivos (ante Brighton y Nottingham Forest), el Manchester City se proclamó campeón. Fue en mayo de 2023. Aún quedan muchos meses y jornadas por delante de la 2023-2024, pero el propósito de Año Nuevo de los gunners es claro y evidente: empezar el 2024 mejor de lo que terminó el 2023.

Los pupilos de Mikel Arteta se quedaron sin regalos en el Boxing Day, tras perder ante el West Ham (0-2), y despiden el año de la peor manera posible. Es decir, con derrota ante el Fulham (2-1). El Arsenal ha pasado en cuestión de días de poder celebrar el inicio de 2024 como campeón de invierno y líder de la Premier League a caer hasta la cuarta posición, a dos puntos de los colíderes Liverpool y Aston Villa, y con un partido más que los reds. Un punto de los últimos nueve, y un adiós amargo y doloroso de un 2023 que había traído muchas y buenas noticias a la parroquia gunner.

Un Arsenal irreconocible se topó con un Fulham ultracompetitivo, y es que el equipo de Marco Silva fue capaz de remontar, con goles de Raúl Jiménez y Bobby Decordova-Reid, el tempranero 0-1 de Bukayo Saka. Las dos derrotas en sendos derbis londinenses no restan favoritismo a los gunners de cara al título liguero, pero sí obligan al técnico español a reinventarse sobre el campo... y Edu, director deportivo, a sondear el mercado invernal en busca de soluciones.

Saka no es suficiente

La reacción de los gunners en Craven Cottage tras la última derrota sufrida ante el West Ham (0-2) fue rápida, pero insuficiente. El oportunismo de Bukayo Saka permitió a los pupilos de Mikel Arteta adelantarse a los cinco minutos de partido. Al inglés le cayó el rechace de Bern Leno tras una salida rápida desde atrás del Arsenal y disparo de Gabriel Martinelli, y a placer marcó su sexto tanto de la temporada.

Una buena noticia para los visitantes en la inauguración del encuentro, pero algo engañosa. El Fulham estaba mostrando una mejor versión que la de sus vecinos del norte de Londres y, cerca de la media hora de juego, el desempeño de los pupilos de Marco Silva dio sus frutos.

En una de las muchas irrupciones de Willian por la banda izquierda, exjugador de los gunners, el brasileño conectó con Tom Cairney. El capitán local puso un balón medido y perfecto para que Raúl Jiménez, que reaparecía tras dos partidos de sanción, anotase su cuarto tanto en los últimos cuatro partidos. Un empate más que merecido.

Mucho más que falta de puntería

El arranque del segundo tiempo no estaba siendo cómodo para el equipo de Mikel Arteta, y los cottagers se encargaron de confirmarlo. El oportunismo que permitió a Bukayo Saka adelantarse en la primera mitad cambió de bando y, a través de Bobby Decordova-Reid, dio lugar al 2-1 del conjunto a los 60 minutos de partido. El balón, en medio de barullo en el interior del área tras un saque de esquina, le cayó al ‘14′ del Fulham, que no perdonó ante David Raya.

La falta de puntería y finalización, como ya le ocurrió ante el West Ham y ejemplificada en las grandes ocasiones desperdiciadas por Bukayo Saka o Gabriel Magalhães, volvió a lastrar a los gunners. Tan insuficiente fue el arreón final del Arsenal que Andreas Pereira estuvo más cerca de firmar el 3-1, tras estrellar una falta en el larguero en el 88′, que los pupilos de Mikel Arteta de anotar el gol del empate. La intensidad de los cottagers pasó por encima del equipo del norte de Londres y les permitió volver a la senda del triunfo tras dos derrotas consecutivas.

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