Siesta, susto y Saka

A los pupilos de Mikel Arteta les sonó el despertador justo a tiempo para no llegar tarde al trabajo. Apuró tanto el Arsenal la hora de la siesta que la visita del Southampton al Emirates Stadium a punto estuvo de costarle un disgusto. No fue hasta que el colista de la Premier League estrenó el marcador cuando los gunners recordaron que tropiezos así son los que pueden costarle el título liguero. Aunque Mikel Arteta volvió a echar en falta a Martin Ødegaard, las versiones de goleador y asistente de Kai Havertz y Bukayo Saka siguen haciendo del cuadro londinense un equipo casi imparable.

El alemán igualó la racha de Robin van Persie de siete partidos consecutivos marcando en el Emirates Stadium y el inglés continuó haciendo historia con sus respectivas séptima y octava asistencias del curso liguero en el estreno de Mikel Merino en la competición doméstica. Pero el ‘starboy’ del Arsenal también sabe marcar, y él mismo se ocupó de poner la puntilla al equipo de Russell Martin. Por suerte para la parroquia gunner, todo quedó en un mal despertar. El Arsenal se mantiene como tercer clasificado de la liga inglesa, empatado a 17 puntos con el Manchester City y tan solo uno por detrás del Liverpool. La lucha por la Premier League sigue intacta para el equipo de Mikel Arteta.

Más bostezos que “uy”

El planteamiento ultradefensivo del Southampton en el Emirates Stadium no impidió que los pupilos de Mikel Arteta merodeasen, con asiduidad y sensación de peligro, las inmediaciones del exgunner Aaron Ramsdale. El partido perdió ritmo con el paso de los minutos y los ataques excesivamente estáticos del Arsenal no ayudaron al que el juego fuera dinámico, profundo y, a fin de cuentas, entretenido. David Raya se pasó los primeros 45 minutos como un espectador más y, salvo por sendos disparos de Jorginho y Thomas Partey desde la frontal, en el feudo gunner se escucharon más bostezos que “uy”.

Saka nunca (se) duerme

Y de tanto bostezar, el Arsenal se durmió. Más concretamente, Raheem Sterling. Una pérdida del extremo inglés y la falta de contundencia de William Saliba, impropia del zaguero francés, permitió al Southampton dar la campana. Para sorpresa de todos, Cameron Archer inauguró el marcador a los 10 minutos de reanudarse el juego. No obstante, la alegría le duraría muy poco a los pupilos de Russell Martin.

Apenas cuatro minutos después del 0-1, Kai Havertz anotó su sexto gol del curso. Todos ellos, ante sus aficionados. Esta vez fueron los saints quienes perdieron el balón en una zona prohibida del campo, Bukayo Saka el que lo recuperó y el atacante alemán el que recortó distancias con un zurdazo que tocó en el palo. Como no había tiempo que perder, Mikel Arteta introdujo a toda la artillería pesada de una tacada (Gabriel Martinelli, Leandro Trossard y Mikel Merino), y el conjunto londinense le dio la vuelta al resultado. La octava asistencia del curso para Bukayo Saka en siete jornadas de Premier League fue mágica. Un centro perfectamente medido al segundo palo que encontró a Gabriel Martinelli. Aunque el tanto tuvo que ser revisado por el VAR, lo del brasileño terminó siendo entrar y besar el santo.

El remate que se estrelló en el larguero de la portería defendida por David Raya volvió a sobrecoger a la parroquia local. Fue entonces Bukayo Saka quien se encargaría de calmar definitivamente a los suyos. Los saints no acertaron a despejar la salida a la contra de Leandro Trossard y el extremo inglés apareció para apuntarse, con el 3-1 final, a la remontada del Arsenal. Ídolo y estrella del Emirates Stadium, Bukayo Saka llega al parón de selecciones en el mejor momento de su carrera.

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