El arquitecto del Flamengo de Filipe Luís
José Boto es una figura clave del éxito del actual Flamengo. Tras cobrar protagonismo en etapas brillantes de clubes como el Benfica o el Shaktar, su estancia en el Mengao ha sido crucial para las llegadas de estrellas como Saúl, Lino, Jorginho o Danilo.
Flamengo vive en la actualidad una de las etapas más excelsas de su historia. Líder del Brasileirao y de nuevo en una final de Libertadores, el club carioca tiene en su mano un doblete histórico impulsado por un entrenador sobresaliente y una plantilla tejida con mimo y empeño, con varios de los jugadores más importantes de toda Sudámerica.
Un poco más apartado del foco mediático, un hombre es otro de los grandes protagonistas del éxito de este Flamengo: José Boto. El actual Director Deportivo trabaja mano a mano con Filipe Luís en la confección y la gestión del primer equipo. En este pasado mercado, fue el artífice de la llegada de Saúl Ñiguez cuando el español lo tenía hecho con el Tranzsbospor turco. Poco después, firmó la llegada de Samu Lino procedente del Atlético de Madrid. También inició negociaciones por João Félix antes de su fichaje por Al Nassr.
Boto ha planteado desde el primer día una estrategia de mercado que consiste en traer a jugadores del fútbol europeo y en plenitud de condiciones. Las incorporaciones de dos figuras del primer nivel de la élite mundial como Danilo y Jorginho así lo demuestran. Con este modelo, los jóvenes de la cantera pueden aprender y competir al lado de jugadores que permiten que su desarrollo sea mucho más voraz.
Un pasado que lo avala
Antes de ocupar la dirección deportiva de Flamengo, José Boto pasó por clubes como Benfica o Shaktar en momentos de plenitud de ambos. En Benfica fue Director de Ojeadores y avaló las llegadas de jugadores de la talla de Di María, Ramires, David Luiz, Matic o Witsel.
Durante su estancia en el club lisboeta tuvo lugar la explosión futbolística de estrellas como Bernardo Silva, Ederson, Guedes u Oblak.
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En su estancia en el Shaktar, confió en un joven entrenador italiano llamado Roberto De Zerbi. El técnico sería el gran director del mejor Brighton de la historia. Como curiosidad, cuando era parte de la estructura del PAOK, recomendó a la directiva el fichaje de un delantero sueco que militaba en el Coventry: Viktor Gyökeres. Lamentablemente, los ejecutivos jamás dieron luz verde a dicha incorporación.
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