Drinkwater relata su calvario en el Chelsea: “He perdido mis mejores años”

Danny Drinkwater fue uno de los protagonistas principales de aquella liga del Leicester en 2016. Una de esas épicas que acaban dejando héroes que perduran con el paso de los años. En el caso de Danny fue así. Una figura carismática que abandonó Leicester en 2017 para firmar por el Chelsea un contrato de cinco temporadas. Sin embargo, en Londres no salieron las cosas como él esperaba. Quedó relegado a un segundo plano y se vio abocado a una situación que le hizo pasar una de sus etapas más duras. El jugador vivió un ‘infierno’ en Londres. Ahora, una vez liberado por los ‘blues’, Drinkwater ha hablado en exclusiva con el medio SkySports, donde ha ofrecido un relato de lo más complicado tanto en la faceta deportiva como en la personal.

“Me siento aliviado porque no fue un situación buena ni para mí ni para el club”, así explicaba Drinkwater a la cadena inglesa lo que ha sentido una vez ha salido del club londinense. Afirma que no se siente amargado con la situación: “Estoy enfadado por cómo se ha dado todo y por cómo me han tratado (...) No puedo culpar al club. Hasta cierto punto tampoco puedo culparme a mismo. No creo que sea culpa de nadie porque han ocurrido muchas incertidumbres”

La oscura estancia de Drinkwater en el Chelsea va mucho más lejos de lo deportivo. Más allá de realizar únicamente 23 apariciones con los ‘blues’, las cosas realmente se torcieron cuando tuvo lugar un episodio en 2018 entre el jugador y el entrenador de entonces, Maurizio Sarri. En el último día del mercado estival de 2018, a falta de una hora para que se cerrara el mercado, se reúnen Gianfraco Zola y Sarri en las oficinas del club. Es allí donde le comunican al jugador que no entran en sus planes. “Llegué a la última hora de mercado cuando Zola me comunica -traduciendo a Sarri- que no considere que esté en los planes del club” Su reacción, tal y como relata, fue de incredulidad: “Yo estaba como ‘¿qué?”.

Finalmente, y pensando en su hijo, Drinkwater decidió quedarse hasta enero: “Tengo un hijo pequeño. Él es mi prioridad ... ¿Por qué me decís esto a una hora de que se cierre el mercado? Necesito tiempo”. Le ofrecieron equipos en el extranjero para que pudiera considerar esa opción. Aquí es donde Drinkwater empieza a abordar varios dilemas a raíz de pensar que había desperdiciado sus años en el Chelsea: “Sí, te sientes como si hubieras tirado esos cinco años (...) Si me hubiera quedado en el Leicester, si me hubiera lesionado, si me hubieran tratado mejor... todo son ‘ifs’”

A ese momento tan duro de Drinkwater en el ámbito futbolístico se le sumó una situación compleja en lo personal. Su salud mental se vio afectada, y desde el lado mediático solo había ‘cuchillas’ hacia él. Se ponía en cuestión su compromiso y se le acusaba de tener una vida fácil, cuando realmente, Danny estaba viviendo un tormento. “Eso no era cierto (...) ¿vivir la vida? (...) eres consciente de que no estás involucrado en el fútbol. Es verdad que podía hacer muchas cosas, pero en el fondo hay cosas que te queman” se refería el jugador a las situaciones en las que podía alejarse de todo lo que le perseguía por dentro, pero que sin embargo, no era fácil para él.

Destacó la importancia de ser abierto para hablar con las personas adecuadas. Algo que él reconoce que le costó aprender porque se autoconvencía de que era lo suficientemente fuerte como para lidiar con ello. Pero la vida tiene sus momentos de injusticia, donde los golpes van creciendo. Danny lo sufrió en sus propias carnes “Sufro problemas de salud mental. Murió mi abuelo, a mi padre le diagnosticaron leucemia y perdí a mi perro. Empecé a conducir bajo los efectos del alcohol. No era yo. Cometí un gran error. Además, también estaba luchando por mi hijo (...) Estaba perdido”. Algo que le hizo reflexionar sobre escudarse en el fútbol cuando también te está afectando: “Cuando el fútbol va bien, todo lo demás parece más fácil, pero cuando no va bien, todo se hace más pesado”.

El haber vivido todo esto en tan poco tiempo y un contexto tan desfavorecedor han hecho que Danny Drinkwater mire hacia el futuro. Actualmente no tiene equipo. Su última etapa cedido en el Reading le ayudó a recuperar su confianza. Ahora, a la espera de una nueva etapa dice que se siente con ganas: “Me encanta ganar. Hay opciones. Solo se trata de tomar la decisión”.