Doku y Bernardo lideran la exhibición del City

Demasiado City, muy poco Bournemouth. La diferencia entre unos, que aspiran al liderato, y otros, que huyen del descenso, fue palpable. Notoria e instantánea. Guardiola recibió a Iraiola en el Etihad y no tuvo piedad. Los del sur de Inglaterra supieron contener a Haaland, que tuvo una buena actuación, pero vio cómo la zaga visitante tapó sus intentos una y otra vez. Con el noruego rodeado, fueron otros quienes tomaron protagonismo. Tiene donde elegir el City, y tanto Doku como Bernardo estuvieron a la altura.

El portugués inauguró una serie interminable de ocasiones locales. A los diez minutos disparó desde el vértice del área tras un saque de esquina, aunque demasiado alto. Rodri tiró raso primero, pero Radu paró fácil solo tres minutos después. Pasaron cinco y el madrileño volvió a intentarlo desde la frontal. Con más potencia, con más altura, pero con menos puntería. El asedio fue constante, y apenas hubo que esperar media hora para que se abriera la lata.

Hartazgo de combinaciones locales alrededor del área rival. Con aplomo, con soltura. El Bournemouth despejaba cada acción como pudo, defendiéndose con sus espaldas casi sobre la línea. Tapando la portería. Se sucedieron los saques de esquina, hasta que la presión pudo con los visitantes. La presión y Doku. El belga recibió en el vértice tras el enésimo saque de esquina. Penetró en el área gracias a una pared con Rodri y marcó con un disparo al palo derecho.

Su caracoleo posterior, solo cuatro minutos más tarde, terminó en otro tanto. Dentro del área, y pegado a la línea de fondo advirtió la llegada de Bernardo desde atrás, y el luso marcó de primeras con el interior. La sentencia llegó cuatro minutos más tarde, en el 38. Ambos protagonistas volvieron a combinar para cerrar definitivamente el partido, por si aún había alguna duda. Fue Bernardo quien raseó para Doku en esta ocasión. Nuevamente en la frontal, el belga hizo una finta y disparó duro con la izquierda. El esférico golpeó en Akanji antes de colarse en la meta y el defensor se quedó con la autoría del tanto.

Tiró de optimismo el Bournemouth en el inicio de la segunda mitad. Y creyeron haber recortado la distancia en el marcador cuando Solanke marcó desde cerca. Sin embargo, Christie, su asistente, había arrancado en fuera de juego y el VAR lo castigó anulando el tanto.

Guardiola había sentado a Haaland tras el descanso, y fue sustituto Foden quien anotó el cuarto de la tarde. Siguió el dominio local, siguieron las ocasiones y siguieron los goles. Pasada la hora de juego, Foden arrancó desde el centro del campo, encontrando a Doku en la izquierda y apoyándose en el belga, quien le ofreció la pelota de nuevo dentro del área. El inglés no erró cerca del punto de penalti. El gol de Lucumi a última hora solo sirvió para ofrecer algo que celebrar a los aficionados que cruzaron el país de sur a norte para ver al Bournemouth.

Ni siquiera fue un susto. E incluso hubo tiempo para que Bernardo y Aké hicieran más daño con dos tantos más en los últimos minutos. Para entonces, los puntos ya estaban guardados en el Etihad. Tienen 27 los celestes. Su victoria del sábado los aupó a la cima a la espera de lo que Arsenal y Tottenham hagan en sus respectivos partidos.

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