Comunión con Abel Ferreira

Palmeiras es un polvorín, o al menos eso es lo que se transmite de puertas para fuera. Los últimos resultados han calado dentro de la afición del Verdão. Por primera vez desde su llegada, Abel Ferreira está más cuestionado que nunca. Desde la entidad el mensaje que se traslada es de unidad, el arquitecto de la etapa más gloriosa del club es intocable.

La continuidad del de Penafiel es una incógnita. En el Allianz Parque quieren que continúe, pero la última decisión la tendrá el propio entrenador. Galones tiene más que de sobra. Es un ídolo y se ha ganado el derecho a decidir su futuro, para bien o para mal. Con contrato hasta diciembre de este año, la oferta de renovación del Verdão -hasta diciembre de 2027- está sobre su mesa.

“Mi familia debe decidir si me quedo o no este año. Pero este no es el momento de decidir nada. Lo importante no era, ni será, Abel. Lo más importante siempre será lo mejor para Palmeiras. Ninguno de ustedes me conoce. Si de verdad quisieran conocerme y saber quién es Abel, le preguntarían a quienes trabajan conmigo, no a periodistas que no les gusta ni Palmeiras ni Abel", analizó tajantemente el técnico.

Apoyo de Mouriño

El trabajo de Abel Ferreira no ha pasado desapercibido. En el gremio se le considera uno de los grandes nombres del fútbol sudamericano, especialmente por todo lo que ha cosechado desde su llegada en 2020. José Mourinho fue el último en rendirse al trabajo de su compatriota.

“(Abel) Hace algo difícil, algo que los entrenadores no suelen hacer: después de ganar mucho, llega el momento de irse. Y no se ha ido. Siempre se ha quedado, en un equipo que obviamente ofrece condiciones fantásticas. También se nota la empatía entre él y el presidente, pero siempre acaban vendiendo jugadores, formando a otros, buscando soluciones. Ha sido una carrera brillante“, comentó The Special One en una entrevista para SportyNet.

A la espera de más fichajes

Mientras tanto, el Verdão sigue en plena reconstrucción de su plantilla. Jefté, lateral izquierdo del Rangers, y Carlos Miguel, portero suplente del Nottingham Forest, están cerrados y se espera que el anuncio sea a lo largo de esta semana. No serán los únicos en aterrizar al Allianz Parque. Julio Enciso es el gran deseado, pero no será fácil.

El paraguayo acaba contrato con el Brighton en junio de 2026 y no renovará. De los casi 60 millones que pedían el verano que viene, ha pasado a apenas 20 ‘kilos’. Una cantidad accesible, pero que intentarán rebajar aún más. Enciso es la guinda a un pastel con el que esperan volver a competir por la Libertadores. En São Paulo la máquina no para.

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