Álvarez corona al City

Guardiola ha ganado la Copa del Mundo de Clubes con cada equipo que ha dirigido. El del viernes fue el cuarto éxito de su carrera en la competición. Un triunfo para cerrar un ciclo histórico del City. El catalán tiene contrato hasta 2025, pero los cityzens lo han ganado todo a sus órdenes. Sin Haaland ni De Bruyne, pero con Álvarez como protagonista. A sus 23 años marcó dos goles para añadir otro título a una lista en la que apuntó la Libertadores, la Liga de Campeones y el Mundial en las últimas temporadas.

Abrió el marcador a los 40 segundos. Aké disparó desde lejos contra el poste, y el argentino cazó entonces el rebote para enviar la pelota a la red con el pecho. Instintivo, con olfato. Aún no se había alcanzado el primer minuto y la ausencia de Haaland, que vio el partido desde la grada junto a De Bruyne, pasó a un segundo plano. Con paciencia, moviendo el balón en espacios reducidos junto a su propia área, el Fluminense fue metiéndose progresivamente en el partido. Aunque la intensidad del City dificultó que los cariocas superasen el centro del campo.

Ederson derribó a Cano en el área en el minuto 17, pero la acción quedó invalidada por fuera de juego. Fue el mayor peligro que el Flu pudo crear antes de que el City doblase su ventaja. Antes de la media hora, un envío raso de Aké llegó a Foden gracias a un despiste de André que perdió la marca del inglés. El cityzen recibió en el área, oteó el horizonte y trató de asistir a los compañeros que asomaron tras la zaga rival. Nino se lanzó a interceptar el esférico, pero terminó enviándolo a la red. Fácil para los de Guardiola, que solo suspiraron cuando Arias remató un saque de esquina a cinco minutos para el descanso. Los reflejos de Ederson sacaron a los mancunianos de cualquier apuro.

Fabio negó una doble ocasión de Grealish y Bernardo tras la reanudación. Pese al aviso y a los cambios de Fluminense, la intensidad decayó. Los brasileños no volvieron a meterse en el duelo, y el City controló el resto del partido. No sin malas noticias. Una dura entrada de Gomes en el centro del campo lesionó a Rodri, que no pudo disputar los veinte últimos minutos de partido. Sí vio desde el césped cómo Foden cerró la final con el tercer gol. Marcando a placer después de una combinación de Álvarez con Kovacic. Con todo resuelto, Álvarez añadió el cuarto a la cuenta.

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