Weir ingenia, Redondo ejecuta

La magia de Weir fue suficiente. El Real Madrid se llevó la victoria de Buñol gracias a la escocesa, que abrió el marcador de penalti y dio una genial asistencia a Alba Redondo para el segundo. El Levante recortó distancias con un tanto Eva Alonso, pero se quedó a medias en su intento de remontada.

Hizo lo esperado Toril para seguir repartiendo minutos entre sus futbolistas tras la victoria en Zubieta el martes y salieron de inicio Méndez, Shei García, Yasmim, Teresa y Alba Redondo. Mientras, Ángel Saiz se estrenó en el banquillo del Levante con dos retoques en su equipo titular, uno obligado, por la sanción de Bascu, y otro, voluntario: Carrasco y Daniela Arques fueron las beneficiadas. A la murciana le tocó emplearse a fondo en el medio y en las ayudas defensivas junto a Paula Fernández. Las dos eran las encargadas de hacer frente al juego de Angeldahl y Teresa, que pronto se hicieron con la posesión de balón, y fue precisamente la gallega la primera en probar los reflejos de Tarazona con un gran chut desde la frontal en el minuto ocho. Como demostró en el Johan, hay portera para muchos años en Buñol.

A la sinfonía que intentaban componer las medios del Madrid les acompañaba entre líneas una inspirada Weir, dinamizadora y con la varita mágica cargada. Yasmim cumplía haciendo de Olga por la izquierda y un centro suyo supuso la segunda gran ocasión blanca, rematada fuera por Alba Redondo en el 12′. El tercer aviso merengue llegó en una falta colgada de Weir que Méndez prolongó para que Angeldahl disparase a placer desde el interior del área, pero el balón rebotó en el muro granota. Era el minuto 20 y las de Toril ya habían calentado motores lo suficiente como para encontrarse con un penalti de lo más protestado por las locales. Alba Redondo había caído en el área en una jugada acabada por Athenea y Fírvida Fernández lo señaló. Weir lo anotó. Fin al gafe desde los once metros. Apenas cuatro minutos después Angeldahl y Shei combinaron en la frontal y la escocesa tuvo un pensamiento, como Amaia, que convirtió en lujo para asistir a Redondo, que puso el 0-2 en el marcador. La eterna ley de la ex.

El Levante, que de eso sabe mucho, se rehízo para probar a Misa a la media hora con un gran chut de Érika desde el perfil izquierdo mientras que un contragolpe en un córner se convirtió en un mano a mano de Linda con Tarazona que ganó la portera granota. La valenciana mantuvo con vida a las suyas y lo aprovecharon las suyas en un córner: Arques lo puso y Eva Alonso, tras zafarse de Shei, lo remató a las mallas. Había partido.

La buena fe del Levante

El tanto de la central granota y el paso por vestuarios trajo al campo a un Levante que terminó de salir de la jaula para buscar el empate. Chacón ponía a prueba la velocidad de Méndez, Arques era una máquina de recuperar balones y jugarlos y los repliegues se habían a la perfección. Paula Fernández lo intentó desde la frontal, pero a las de Ángel Saiz les faltaba mordiente. También banquillo.

Lo contrario que al Real Madrid, que metió en el césped a Olga, de extremo, Toletti y Feller, de regreso al equipo tras superar su lesión de tobillo, para volver a mandar. Y pudo sentenciar con un gol de Redondo en el 76′ a centro de Olga que fue anulado por un fuera de juego de los que la realización de la Liga F todavía no aclara. Es otro de los deberes de una competición en la que el equipo blanco continúa segundo para presionar a un Barcelona que visita al Espanyol y que está solo dos puntos por encima.

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