Una decepcionante Estados Unidos queda segunda

Honores para la eliminada Portugal y decepción de la actual campeona, Estados Unidos. Las portuguesas, que debutaron en un Mundial, cuajaron un gran partido ante la superpotencia americana y pudieron dejar en la cuneta a Estados Unidos en el 90 con mano a mano que Ana Capeta mandó al palo. Las lusas fueron mejores que una inoperante Estados Unidos, sin ideas ni prácticamente ocasiones.Las americanas empatan su segundo partido en la fase de grupos que les condena a ser segundas por detrás de Países Bajos, que hizo sus deberes frente a Vietnam. Las estadounidenses son cada vez menos ogro...

Estados Unidos dependía de sí misma para ser primera de grupo, pero Portugal también para llevarse el pase a octavos de final. Los dos equipos, con mucho en juego, salieron con una gran intensidad e intentando presionar a su rival. La primera fue para Morgan, que remató una centro lateral que acabó en córner. Williams probó poco después a Pereira con un buen cabezazo y otra vez Morgan lo intentó de volea. Portugal se defendía ante una Estados Unidos que buscaba un fútbol muy directo. Sin embargo, las lusas no habían planteado el partido sólo para defender y Norton fue la primera en avisar. Después fue Silva la que se precipitó tras un gran balón al espacio. Las de Neto sabían perfectamente lo que tenían que hacer y lo ejecutaban a la perfección, mientras las americanas cada vez estaban más desdibujadas y sin ideas. El centro del campo no funcionaba ante la superioridad numérica de Portugal, las extremos no encontraban espacios y Morgan no podría recibir en condiciones de hacer daño. A la media hora, Williams pudo abrir el marcador tras una gran jugada de Morgan. Pero Estados Unidos seguía atascada, sin encontrar espacios en el entramado portugués.

Tras la reanudación se mantuvo el mismo guión: Estados Unidos no sabía cómo hacer daño a Portugal y las lusas esperaban su gran ocasión. Morgan y Williams seguían siendo las que más lo intentaban, pero sus remates siempre eran forzados y en mala posición. El balón parado era el gran arma estadounidense, porque no Lavelle no conseguía conectar con las de arriba que, sin espacios, estaban maniatadas. Lo intentó Andonovski con la entrada de Rapinoe. Carácter y visión de juego para acabar con la resistencia portuguesa. Pero ni por esas. El inoperante centro del campo y la presión portuguesa provocaba que las estadounidenses cada vez estuvieran más desesperadas buscando ese gol que no llegaba. Y en el tramo final, Portugal empezó a acercarse con más peligro a la portería de Naeher. Con balones a los espacios y la velocidad de sus puntas, las lusas querían culminar la sorpresa del campeonato. Y lo pudo hacer por medio de Capeta que encontró el balón al espacio y en el mano a mano superó a Naeher, pero el esférico se estrelló en el palo. Era el 91′ y Estados Unidos tenía más miedo a perder que intención de ganar. Ocho minutos de añadido en los que las estadounidenses estuvieron más pendientes de alejar a Portugal de su portería que de llegar a la portería contraria.

Estados Unidos acaba segunda de grupo después de sólo conseguir sumar una victoria en tres partidos, mientras que Países Bajos es primera.