¡Super-Jenni y a octavos!

“Este es el lugar perfecto para enamorarse” es el mural con el que recibió el Eden Park de Auckland a la Selección. Y fue La Roja la que hizo enamorarse a todos. España se marcó un partidazo ante Zambia para certificar su pase a los octavos. Como nunca antes, lograba sellar el primer objetivo a las primeras de cambio: en dos partidos. Fácil y con signos de gran potencia. Con Alexia Putellas volviendo a reinar. Con Tere, Jenni y Alba goleando. No era un sueño, era realidad.

El 1-0 de Tere Abelleira

Alexia saltó de titular. Todos los focos se giraron hacia su melena rosa. Por fin, después de un año de espera, la doble Balón de Oro entraba de titular en un partido oficial. Qué duros han sido esos largos días desde el fatídico 4 de julio de 2022 y su rotura de ligamentos. Pero Alexia no estaba sola. España se presentó ante Zambia con un equipo de estrellas. Vilda ponía toda la carne sobre el asador. Un centro del campo de locura y una delantera de puro talento con Mariona sobre el terreno de juego acompañado a Jenni y Salma, dos portentos.

España no tuvo rival y Zambia se dejó llevar. Así fluyó todo muy fácil. Fue Alexia la que tuvo la primera ocasión antes de los tres minutos. Se les iba a hacer largo el encuentro a las zambianas ante el eléctrico ritmo que llevaba España con el balón.

Tras un arranque de acoso y derribo en el área, Tere sorprendió a la guardameta con un potente disparo que entró por toda la escuadra. Todas se abalanzaron sobre la gallega. El golazo era de película. Pero también lo fue el tiki taka entre Mariona, Alexia y Jenni. Parecía que el esférico les obedecía. Era un reto que las rivales aguantar ese baile. Y el recital siguió en los pies de la Balón de Oro, que puso un centro al segundo palo para que Jenni rematara a placer. Era un festival. Ahora sí España lucía y brillaba como lo que ya es, una potencia mundial.

La conexión Alexia-Jenni

Aunque con una intensidad menor, el equipo de Vilda siguió mandando, demostrando clase y tranquilidad. Y también compañerismo: si tocaba remar, Alexia era la primera en apoyar a Tere en esa función defensiva más desagradecida. Con los cambios en el descanso España cogió aire y Aitana recobró su luz. Fue ella la que tuvo el tercero en un arranque hacia el ataque, aunque el gol se resistió. En la siguiente, Eva puso un centro medido a Mariona, cuyo remate se fue por poco.

Zambia quería decir la última palabra y buscó las cosquillas a las defensoras con Kundananji como revolucionaria. Por suerte, si no estaban Ivana o Paredes, estaba Tere. La madridista está dando pasos de gigante en el Mundial. Es la pieza perfecta que necesitaba Vilda.

Suplentes y goles

La fiesta no estaba acabada y las suplentes también querían su momento. Lo tuvieron. Eva hizo de correcaminos por la derecha para filtrar un pase a Alba que no desaprovechó. A la pichichi no le temblaron las piernas ante Sakala: recorte y balón al fondo de la red. Un minuto después Jenni hacía el cuarto, con la angustia del VAR como invitada. Qué manera de cumplir 100 partidos con La Roja de la madrileña, que pudo irse con un saco al vestuario. La Selección no dejó de intentarlo y llegó el quinto, obra de Alba de nuevo con Zambia por los suelos.

España sigue con paso firme y el espíritu intacto. Ahora queda ante Japón certificar lo que se ha visto en estos dos partidos. Con un empate ante las nadeshiko se planta primera de grupo. Y a soñar.

Doblete de Alba Redondo para cerrar