MUNDIAL AUSTRALIA Y NUEVA ZELANDA

Donald Trump se la devuelve a Rapinoe: “Buen tiro, Megan”

El expresidente de EE UU se acordó de la emblemática jugadora cuando cayeron ante Suecia en los penaltis. Hace 4 años no visitaron la Casa Blanca.

WILLIAM WESTAFP

Estados Unidos dio la sorpresa al caer eliminada ante Suecia en los octavos de final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda. La todopoderosa no pasaba la eliminatoria hacia los cuartos por primera vez en su dorada historia. Uno de los primeros en reacciones al batacazo de las americanas fue un presidente de EE UU, Donald Trump. El exmandatario se acordó, sobre todo, de una de las jugadoras americanas. Esa no es otra que Megan Rapinoe.

Desde hace años es pública la guerra que tienen Trump y la veterana delantera. “La derrota ‘impactante y absolutamente inesperada’ de la selección nacional femenina de EE. UU. ante Suecia es un testimonio de lo que le está sucediendo a nuestra nación bajo el presidente corrupto Joe Biden. Muchas de nuestras jugadoras fueron hostiles hacia nuestro país. Ningún otro país se ha comportado de esta manera”, admitió.

“¡Buen tiro, Megan! ¡Estados Unidos se va al carajo! Maga”

Trump

Pero Trump fue más allá, señalando a Rapinoe, que fue una de las que falló un penalti decisivo en la tanda ante Suecia. “¡Buen tiro, Megan! ¡Estados Unidos se va al carajo! Maga”, sentenció.

Conflicto del pasado

El ‘divorcio’ entre Rapinoe y Trump viene de lejos, incluso de antes de que éste fuera elegido, desde la campaña electoral. Fue en 2019, mientras se disputaba el Mundial de Francia, cuando unas declaraciones de la jugadora puso en escena la guerra abierta entre ambos. En los octavos de final ante España, Rapinoe volvió a negarse a cantar el himno y tampoco llevó su mano al corazón mientras éste sonaba.

Tras el partido ante La Roja, los medios estadounidenses, deseosos de borrar cuanto antes el tuteo de España, preguntaron a la capitana si se sentía emocionada de pensar en ser recibida en la Casa Blanca si Estados Unidos gana el Mundial. “No iré a la puta Casa Blanca”, respondió. Dicho y hecho. Estados Unidos fue campeona del Mundo en tierras francesas y no acudió a celebrarlo con el presidente.

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